Por Santiago Fraga
La marcha contra la inseguridad que se dio ayer en Rosario agitó fuertemente la esfera municipal y provincial, tanto por la masividad de la misma como por la contundencia del mensaje popular. Matías Layús, nuevo secretario general del Movimiento Sindical Rosarino, también conocido como CGT calle Paraguay, habló con Conclusión y se refirió a la misma desde la importancia de ese poder que tiene la gente movilizada, relacionándolo también como un ejemplo a seguir a nivel nacional.
Respecto de la movilización en cuestión, el secretario general de La Bancaria aseguró que “fue un mensaje contundente”, porque “fue una marcha multitudinaria” y donde “la sociedad movilizada le está diciendo a quienes tienen la responsabilidad de gobernar y de tomar medidas en los tres poderes del estado que prioricen este tema”.
“Hoy la sociedad con esa movilización está marcando una agenda”, sostuvo Layús, quien luego continuó: “En la agenda de cuestiones que tienen pensadas los gobiernos, la sociedad le está diciendo: ‘Prioricen el tema de la inseguridad, por la cuestión que estamos viviendo que se está llevando vidas todos los santos días; de trabajadores, vecinos, en distintas circunstancias que cada vez se agravan’”.
En relación con la problemática a nivel nacional, y sobre todo la unificación de la Confederación General de Trabajadores (CGT), aseguró que la función principal que debe cumplir el nuevo triunvirato al mando es, además de estar al servicio de los trabajadores y respetar una agenda gremial, “que sepa trasladar a la Nación, a la Municipalidad y a la provincia una agenda de los trabajadores”, ya que “hoy la agenda la están fijando los empresarios a través de los CEOs y las empresas que están manejando todos los ministerios de la Nación”, y a su vez también la impone “la corporación mediática”.
“Nosotros entendemos que los trabajadores debemos ser quienes propongamos la agenda, y esa agenda tiene que ver con la defensa del empleo; de la producción nacional; con ponerle límites a las importaciones como se está haciendo en la actualidad; proponer una reforma tributaria que deje de gravarnos de una vez por todas el impuesto a la ganancia y que grave los intereses de los que más tienen, de los banqueros, de la renta financiera, del juego, de la minería; donde planteemos una nueva ley de entidades financieras, que venimos heredando una ley que fue pergeniada por José Alfredo Martínez de Hoz en la época de la dictadura y eso ya es insostenible”, detalló Matías Layús, quien agregó que tiene que ser “una agenda que tenga que ver con los intereses del trabajador” y “no una que priorice los intereses de los sectores empresarios o cambiándonos la cultura los medios”.
En este sentido, también destacó que la unificación de la CGT es positiva después de tantos años de estar dividida, pero que no fue una unidad completa y lejos está de ser una solución definitiva.
“Está lejos y va a seguir estándolo hasta tanto no se tomen medidas concretas o no se actúe. Hoy lo que se necesita es acción, estar en la calle; es la única forma de que el gobierno vea que no estamos de acuerdo con este modelo”, sostuvo el titular del Movimiento Sindical Rosarino, asegurando que tampoco se ve reflejado ya que hasta estas horas la CGT unificada no ha convocado a un paro nacional, que es lo que se reclama desde el interior.
“Uno ve o escucha a los referentes oficialistas, sean diputados, senadores, intendentes o gobernadores, todos tienen puesto el mismo casette de que en este país está todo bárbaro, de que lo que está pasando hoy es producto de las consecuencias que dejó el gobierno anterior… son discursos espiritualistas, no tienen nada que ver con la realidad. Yo de chiquito veía países de ficción, veía un país de Trulalá donde Hijitus se transformaba en superhéroe; después más de adolescente vi otro lugar ficticio que se llamaba Melmak de donde había venido un ser llamado Alf, pero nosotros vivimos en la Argentina y la Argentina está con dificultades, y ya lo reconoce hasta un sector importante de la sociedad como es la iglesia”, aseguró sobre la situación que vive hoy Argentina y a la que tienen que hacer frentes los gremios y trabajadores.
Hacer frente a un cambio cultural
Uno de los principales ejes sobre los que se explayó Matías Layús es sobre cómo se le debe hacer frente al “cambio cultural” del que supo avisar hace unos días el presidente Mauricio Macri ante trabajadores de la planta La Droguería del Sud.
“Ese cambio cultural en el mundo laboral viene a afectar no solamente los puestos de trabajo, sino el modelo sindical, los convenios colectivos que se hacen por rama de actividad se pretenden hacer por empresas, vienen por la precarización, la flexibilización, acusan a los trabajadores de ausentarse indiscriminadamente de sus trabajos, de promover sin ningún tipo de sentido juicios laborales. Ese es el cambio cultural del que están hablando, y si no nos hacemos eco de eso y no interpretamos ese mensaje estamos totalmente fuera de foco”, sostuvo con firmeza Layús.
A raíz de esto es que también recordó que después de lo sucedido en aquella gran marcha del 29 de abril, convocada por las cinco centrales sindicales y el veto presidencial a la ley de emergencia ocupacional, era necesario que los trabajadores de todo el país marcaran su posición concretamente con un paro nacional, que todavía sigue “siendo necesario porque el gobierno sigue avanzando y profundizando su plan”.
El posicionamiento del Movimiento Sindical Rosarino
Su nuevo rol como secretario general del MSR se da en el marco de “darle organicidad e institucionalidad” al movimiento, asegurando que está agradecido por la designación y que hay un equipo y un respaldo importante.
Así también, destacó como la característica más importante la coherencia que sostienen en los últimos tiempos, representando en hechos sus palabras.
Movimiento Sindical
“Cuando dijimos que si nos tocaban a un trabajador nos tocaban a todos, esto fue así. Así que estamos lado a lado, codo a codo en los conflictos presentes, acompañando a los empleados de comercio, los metalúrgicos, los telefónicos, los bancarios, los del sindicato de la alimentación, y en cada lugar donde se necesite”, afirmó Layús, quien por otro lado hizo hincapié en que participarán de la marcha federal del 1 de septiembre junto a otras centrales obreras como la CTA y organizaciones estudiantiles, sociales, barriales.
“Vamos a participar de la marcha federal, a seguir acompañando cada uno de los reclamos que tenga otro sindicato y vamos a seguir promoviendo la unidad del movimiento obrero en la regional Rosario, pero no una unidad que sea un amontonamiento de dirigentes, sino una con contenido, que respete una agenda gremial, que quien está al frente de la CGT esté dispuesto a enfrentar este modelo económico que está haciendo estragos en el trabajo y en la economía. Hoy estamos en una etapa de resistencia”, sentenció.
Por último, consultado sobre qué postura tomaría el movimiento si desde la CGT se bajara línea de algún alineamiento político, Layús respondió: “Todos opinamos que desde el Movimiento vamos a mantener la coherencia que venimos teniendo y sostener las políticas propias más allá de los lineamientos nacionales. En nuestro espacio en Rosario confluyen gremios que a nivel nacional están en el MASA (Movimiento de Acción Sindical Argentino), en la Corriente Federal, en la CGT del triunvirato, y acá vamos a seguir coherentemente apostando a este espacio sindical con miras a poder concretar la unidad de la CGT en Rosario. No vamos a aceptar imposicionamientos de nadie en el orden nacional. Vamos a hacer respetar la unidad pero en un marco de la ciudad, en un marco regional, de esta seccional”.
Seguridad en Rosario
Finalmente, sobre la marcha contra la inseguridad de anoche en la ciudad, sostuvo que a raíz de lo hecho por la gente quienes tienen hoy la responsabilidad deberían sentar rápidamente a una mesa de diálogo social a empresarios, trabajadores, a la justicia y legisladores, para consensuar que dentro de las prioridades que debe tener una sociedad la seguridad es una.
“Nosotros como trabajadores hoy nuestra principal bandera es defender el empleo, pero no podemos permanecer ajenos a un tema tan sensible que nos lleva puestos. Nosotros decimos ¿de qué vale discutir ciertas cuestiones laborales cuando nos convoca municipalidad o provincia si no tenemos trabajo?; ahora, ¿de qué vale discutir el trabajo si no tenemos vida? Porque lo que está en juego ahora es la vida. Entonces creo que rápidamente, producto de lo que sucedió ayer en Rosario, debería convocarnos a todos alrededor de una mesa a ver si estamos de acuerdo porque en esto hay que poner esfuerzo, y no solamente en el sentido de la responsabilidad, sino en el sentido material, presupuesto, que acá siempre es la excusa. Hay que convocar a quienes tienen la responsabilidad de que ese presupuesto se aumente y se apruebe para garantizarnos la vida”, describió.
Además de los apuntados a nivel judicial, provincial y municipal, Matías Layús recordó a la Nación como otro de los factores a los que se les debe apuntar a la hora de hablar de inseguridad: “Lo que pasa es que uno ve el problema en su ciudad y su provincia y le reclama al que tiene al lado la responsabilidad política más cercana, pero es indudable que acá también tiene una gran responsabilidad el gobierno nacional, porque acá hay una cuestión subyacente detrás de cada hecho delictivo que se la relaciona con el narcotráfico, o la droga, y son cuestiones de las cuales por ley le corresponde a la justicia federal o a las fuerzas federales de seguridad tratar estos temas, prevenir y darle seguridad a los habitantes, y será cuestión de que rápidamente coordine la nación con la provincia cuál podría ser la solución”.
