La Unión Obrera Metalúrgica (UOM) ratificó la continuidad del Plan Nacional de Lucha que lleva adelante con la realización de un paro nacional de 48 horas dispuesto para este jueves 20 y viernes 21 de julio.

Según indicó en un comunicado, la entidad gremial estableció un “único y central objetivo” que es “poner en valor la dignidad de quien trabaja”.

Después de revelar que la reunión paritaria de este jueves se prolongó por casi 12 horas en el Ministerio de Trabajo de la Nación, la UOM denunció que “el sector empresario se negó a brindar una respuesta oportuna a la petición salarial de la unión obrera metalúrgica”.

“En innumerables idas y vueltas que pretendieron modificar los plazos de negociación, establecer como único indicador válido el índice de inflación y reducir con diversos argumentos la recomposición y actualización hacia el salario digno, el sector empresario se negó a pagar salarios que equiparen la canasta básica alimentaria argentina a las trabajadoras y los trabajadores que aportan 186 horas mensuales a la producción industrial”, describieron desde la organización de los trabajadores metalúrgicos.

Enseguida, el comunicado reza: “Para comprender las razones de fondo que forzaron este conflicto, es imprescindible caracterizar a las Cámaras Empresariales que participaron de la negociación. Todas ellas representan empresas que comparten un denominador común: su costo de producción está determinado por el valor de los insumos difundidos que les provee única y exclusivamente las empresas del Grupo Techint”.

“Este es el condicionamiento por el cual se someten a la intromisión, intervención y conducción del grupo Techint, que monitoreó y marcó el ritmo permanente de la negociación paritaria”, señala.

Más adelante, describe: “Como si hiciera falta, a cada paso de la negociación les recordamos que el salario bruto de un operario ingresante se ubica en 129.723,98 pesos mientras la canasta básica alimentaria asciende a 217.915,79 pesos”.

“Pareciera que algunos, acostumbrados a definir unilateralmente el precio de la chapa y los productos de acero que determinan la existencia de industria en nuestro país, desde una posición monopólica y dominante, ahora pretenden también definir unilateralmente el valor del trabajo”, se quejaron desde la organización sindical.

Asimismo, señalan que “a las claras se evidencia que la negativa a pagar salarios dignos no se corresponde a una incapacidad económica ni productiva. Por el contrario, estas empresas representan a los sectores que con más fuerza están siendo parte del proceso de reactivación del desarrollo industrial argentino, con un fuerte acompañamiento de políticas estatales para garantizar que estos resultados sucedan”.

Finalmente, la UOM subraya: “Pretenden que la sociedad entera naturalice que pueden existir empresas que paguen salarios de pobreza en la Argentina. una empresa que no puede afrontar salarios que equiparen la canasta básica alimentaria es una empresa inviable en cualquier rincón del mundo”.