“Si me pongo el traje de economista, recomendaría comprar dólares, y si es en negro mejor, así no tienen que pagar un montón de impuestos estúpidos”, señaló el presidente desde Bariloche, donde participó de un foro con empresarios.
Apenas bajó del escenario, el mandatario recibió las felicitaciones de Marcos Galperín, dueño de Mercado Libre, y Cristiano Rattazzi, titular de Fiat.
El Gobierno nacional, a través del ministro Caputo, pidió a empresarios aminorar los aumentos. “Si el presidente dice que el Estado no sirve y después sus políticas arrojan problemas que el mercado no resuelve, lo que hay que decir es que esa idea no funciona”, sentenció el economista Esteban Guida.
El encuentro tendrá sobre la mesa diversos temas asociados a las políticas económicas que impulsa La Libertad Avanza, en un escenario recesivo que tiene niveles de consumo desplomados.
El titular de la UTA Rosario, Sergio Copello, adelantó que a media tarde habrá una reunión con los empresarios y, en caso de llegar a un acuerdo salarial, se levantará el paro de 24 horas previsto para este martes 5 de marzo.
El máximo tribunal frenó una decisión de la Cámara del Trabajo sobre indemnizaciones.
El entendimiento alcanzado entre el gremio y las cámaras patronales contempla el pago de 150.000 pesos para enero y aumentos del 190 y 230 por ciento para los meses de febrero y marzo, tomando como base el salario percibido en marzo de 2023.
El avance sobre los derechos del pueblo se reflejó en los dos mamotretos presentados por el actual gobierno: el DNU 70/23 y el proyecto de Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos, que perjudican a los trabajadores, a los jubilados y pensionados, a los inquilinos, a los consumidores, al patrimonio nacional y a nuestra soberanía, pero benefician al gran capital, tanto local como extranjero.
Para Carlos A. Ortíz, hay "incoherencia total que los entes empresariales que apoyan este neoliberalismo recargado, incluyen a los que nuclean al pequeño y mediano empresariado, el cual está siendo forzado intencionalmente a desaparecer".
El sueldo mínimo, vital, y móvil está establecido desde el 1º de diciembre en 156.000 pesos, lo que lo ubica en una notable situación de atraso frente a la inflación.
Desde la organización que nuclea a pequeños y medianos empresarios señalaron que para las pymes, “atacar a los trabajadores es pegarse un tiro en el pie”.
El personal lo describe como una "despreciable estrategia" que "no cierra sin despidos masivos y sin violentar todos nuestros derechos laborales». Asimismo, denuncian que, aún estando bajo conciliación obligatoria, les descuentan haberes y que “evaden al fisco".