El gobierno de Javier Milei permitirá que el pasaje de colectivo urbano se pague con cualquier tarjeta e incluso con el celular, para que el sistema SUBE deje de tener exclusividad en la operación. Si bien próximamente saldría un decreto con este cambio, la medida ya fue confirmada por el vocero presidencial, Manuel Adorni.

En su habitual conferencia de prensa, durante la mañana de este lunes el funcionario anunció: “El Gobierno tomó la decisión de liberar el sistema de pago en el transporte público, como ocurre en otras ciudades del mundo donde se puede abonar con tarjeta, el celular o el medio que se crea más conveniente”.

Y completó: “La SUBE, que seguirá cumpliendo un rol clave para fiscalizar los servicios y gastos de las empresas de colectivo, será una opción más pero no la única. Esto significa no solo simplificar un servicio que se creó hace 15 años, sino también la federalización total del sistema”.

La idea es quitarle la exclusividad de la gestión de los cerca de 400 millones de pasajes que se venden cada mes a Nación Servicios, un organismo del Banco Nación. Así, se permitirá que los usuarios de colectivos, trenes o subterráneos puedan pagar los boletos con billeteras virtuales y tarjetas de débito o crédito.

El decreto apuntaría a derogar el 84/2009, que puso en marcha el Sistema Único de Boleto Electrónico (SUBE), el cual quedó bajo operatoria del Banco Nación. Según fuentes cercanas a Transporte, los dispositivos que se ubicarán en colectivos, estaciones de trenes y subtes deberán aceptar todas las tarjetas bancarias, de débito, crédito o prepagas y no habrá exclusividades de ningún tipo.

Celebraciones y dudas

El anuncio despertó diversas repercusiones: hubo quienes aseguraron que así se fomentará la libre competencia y podría haber beneficios para los usuarios; mientras que otras personas se preguntaron qué comisiones cobrarán las empresas, cómo manejarán los datos privados de los pasajeros –que actualmente están unificados en una sola base– y cómo se garantizará el pago de subsidios a quienes los necesiten.

El presidente de la Asociación de Bancos Argentinos (Adeba), Javier Bolzico, manifestó: “Las entidades competirán para ver quienes ofrecen mejor servicio y más beneficios a los usuarios de transporte público, para que lo elija”.

Por su parte, el diputado nacional Damián Arabia expresó: “SUBE es una empresa estatal monopólica (Nación Servicios), de 1.050 empleados, que cobra el 7% de comisión de cada pasaje de tren, colectivo o subte, cuando una tarjeta de crédito cobra como máximo el 1,8% o débito el 0,8%”.

Por otro lado, quienes criticaron la iniciativa aseguraron que la SUBE contiene datos personales e información financiera de las personas, y apuntaron que dispersar los medios de pago podría “vulnerar la privacidad de millones de usuarios”.

“La migración de datos de SUBE a múltiples plataformas conlleva un ruptura de la privacidad legal y de una complejidad (tarifa social, red SUBE, y otros descuentos) de traslado información y costos”, señalaron, citados por Infobae.

Otra duda que surgió es cómo se haría el control de operaciones para el pago de subsidios en el boleto o la aplicación de la tarifa social.