El presidente Javier Milei anunció durante la mañana de este viernes que “el momento más duro” del ajuste será durante marzo y abril, al tiempo que expresó su esperanza de que a mitad de año pueda bajar los niveles de inflación, abrir el cepo cambiario y provocar un crecimiento económico.

En diálogo con Radio Rivadavia, el presidente aseguró que los datos económicos que arrojaron los primeros dos meses de su gestión son “una fiesta” ya que en enero se alcanzó el déficit cero y se logró bajar el dólar, el riesgo país y la inflación. En cuanto al aumento de precios, adelantó que “en las dos primeras semanas de febrero el alza fue del 10%”, al tiempo que puso en duda que haya una nueva devaluación.

“El ajuste no terminó. Hasta que no tengamos solidificado el alivio fiscal no vamos a relajar ni medio milímetro. En paralelo, estamos limpiando el balance del Banco Central. Faltan pesos”, señaló el mandatario y, seguidamente, ratificó que está “más cerca de dolarizar” y que a mitad de año abrirán el cepo si las condiciones económicas actuales se mantienen.

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Al ser consultado sobre el impacto que el ajuste tendrá en la población, Milei comparó a la situación con una letra “V”: “Tenemos un primer tramo de caída, el momento más duro va a estar en torno a marzo u abril, y a partir de ahí, cuando tocaste fondo, empezás a rebotar. Cuando abrís el cepo, la economía se dispara para adelante y se empieza a recuperar fuerte”.

Además, aseguró que el fracaso de la ley ómnibus en la Cámara de Diputados representó, para su gobierno, un “éxito rotundo” porque “ordena el plano electoral de acá al 2025”, al exponer quiénes fueron los legisladores y gobernadores que no acompañaron el proyecto.

En tanto, el mandatario aseguró que “el éxito más rotundo” del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que publicó a fines de diciembre fue la derogación de la Ley de Alquileres: “Se duplicó la oferta y el precio en términos reales se está desplomando”.

Milei dijo que no convocará a paritaria docente

En otro tramo de la entrevista, Milei volvió a justificar el recorte de fondos enviados a las provincias: “Si no están en condiciones de manejar sus finanzas, es problema de ellos. La educación depende de las provincias, es un problema que tienen que resolver ellos, yo como Nación no me tengo que meter”.

Tras estas declaraciones, el presidente descartó una convocatoria a la paritaria docente: “La educación, la seguridad y la salud son responsabilidad de las provincias, es un país federal. El estar fijando precios mínimos no nos gusta”.

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En esta línea, adelantó que no fijará por decreto el salario mínimo, tras la frustrada reunión que tuvo lugar este jueves, donde el Consejo del Salario que debía establecer un nuevo monto del haber mínimo. “Es una cuestión que tiene que ser acordada entre los trabajadores con sus empleadores. No creo que un político pueda determinar un precio a mano”, apuntó.

Al ser consultado por los tarifazos, el economista apuntó: “El problema no es que las tarifas sean caras, sino que los salarios son miserables. Tenemos diez veces menos sueldos que Europa porque venimos de años de políticas socialista que nos hunden. Evitamos una hiperinflación, que es el impuesto más regresivo que existe, estamos ayudado a los más vulnerables”.

Tras asegurar que volverá a enviar al Congreso la “Ley de Bases”, pero esta vez por partes, Milei ratificó que se va a “avanzar” en la eliminación de los fondos fiduciarios y se va “a ir contra todas las cajas de la política”.