Por Aldo Battisacco desde Buenos Aires (Enviado especial)
Con la ausencia de Susana Malcorra, y con la asistencia de secretario de Relaciones Exteriores, Carlos Foradori, comenzó la reunión de la Comisión de Relaciones Exteriores, que estuvo signada por la tensión entre las autoridades del Palacio San Martín y miembros de los bloques políticos que la conforman.
El funcionario de cancillería insistió de que se trató de un comunicado conjunto «no vinculante» en tanto la oposición y algunos aliados de Cambiemos fue la de esclarecer la verdadera dimensión del documento en el que se omitió la mención de la soberanía de las islas, la militarización del Atlántico Sur y la exploración y explotación de recursos hidrocarburos en la zona en conflicto.
Foradori sostuvo ante los legisladores de la comisión, que ese comunicado conjunto «establece una hoja de ruta y algunas premisas, pero de ninguna manera tiene carácter vinculante porque para eso debería tener un nivel de detalle que no tiene» y agregó que para «tener fuerza de contrato debería tener firmas», explicó.
En su exposición en la reunión de la Comisión de Relaciones Exteriores, que preside la diputada de Cambiemos Elisa Carrió, Foradori salió al cruce de las críticas y sostuvo que las gestiones oficiales no constituyen una «aventura de un gobierno» sino que se debe resolverse a partir de una estrategia basada en el “diálogo” por lo cual el comunicado solo constituye una “hoja de ruta” y no tiene carácter vinculante.
A su turno, los aliados de Cambiemos como los miembros otros bloques políticos, mostraron diferencias sustanciales respecto de la políticas con las que el gobierno intenta «seducir» a los isleños y de cuál es la categoría que se pretende aplicar cuando se subsume la cuestión de la Soberanía a un mero acuerdo entre partes de carácter económico.
Guillermo Carmona, vicepresidente de la comisión de Relaciones Exteriores, manifestó estar «más preocupado después de escucharlo» por las analogías que estableció Foradori con la política internacional de vinculación de Argentina de otros «estados como Corea», para rematar diciendo que «la agenda positiva de Argentina con el mundo, con Gran Bretaña, con otros Estados, como si fueran lo mismo… ¡Lamentablemente los argentinos padecemos la usurpación de una parte de nuestro territorio nacional!”, reaccionó el diputano cuyano.
La más animosa expresiónn la tuvo con que “en ningún caso hace reafirmación de la soberanía Argentina” y el tema estuvo “absolutamente ausente en la primera reunión” de Macri David Cameron. Además, observó que en Gran Bretaña «dicen que ellos ellos no se van a mover ni una coma del falso referéndum y Argentina no puso ni un pero de todo esto”, protestó Carmona.
No faltó a la cita y con perspicacia, el vicejefe de los diputados del Frente Renovador, Alejandro Grandinetti, tuvo en vilo al vicecanciller cuando le advirtió que “esta no puede ser una política de buenos vecinos porque Gran Bretaña está usurpando territorio argentino”, y recriminó que no «estaban claros los intentos de explicar» las conductas del Ejecutivo en la materia» y «de los riesgos que se corren por omitir antecedentes en política internacional».
Por su parte, la líder del GEN, Margarita Stolbizer, mostró coincidencias con el oficialismo y aludió que la máxima autoridad del Ministerio de Relaciones Exteriores, Susana Malcorra, tuvo acción destacada cuando tuvo generosidad «para insertar a Argentina en el mundo” y porque “fue valiente cuando desdijo al presidente en declaraciones públicas” sobre lo que aconteció en la reunión que mantuvo con Theresa May.
La interpelación a Malcorra fue promovida mediante la presentación de un proyecto de resolución del diputado de Entre Rios, Julio Solanas, en el que solicitó la presencia de la canciller Susana Malcorra para que informe lo sucedido y que explique porque se omitió incorporar al documento la ratificación de la «soberania» Argentina sobre las islas.
