VIERNES, 29 DE NOV

La carne podría aumentar a partir de septiembre: estiman subas de entre 30% y 50%

Sectores vinculados a la industria cárnica indicaron que, a causa de la sequía, hubo un exceso en la oferta de cortes bovinos, lo que mantuvo el precio estable y muy por debajo de la inflación. Sin embargo, entre octubre, noviembre y diciembre los valores podrían dispararse, calentando las góndolas argentinas. 

 

Tras la caída en los precios registrada en la primera mitad del año, la carne empezó a recuperar terreno en las últimas semanas, y se vienen nuevos incrementos en los mostradores. Así lo reveló el coordinador de la Mesa Nacional de Carnes, Dardo Chiesa, quien anticipó que habrá un nuevo aumento para primavera/verano de este año ya que el precio “está retrasado casi un 50 por ciento con respecto a la inflación”.

En el stand del Instituto de la Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA) en La Rural, Chiera explicó: “La carne bovina hoy está siendo de techo de las otras carnes. Como está barata, está retrasada casi un 50% con respecto al Índice de Precios al Consumidor (IPC)”.

“Cuando pasan estas distorsiones, es que empieza a desacelerarse el proceso de producción, se vacían los corrales y en el transcurso de los 3 o 4 meses siguientes, te empieza a faltar y cuando pasa eso explota el precio. Creemos que para primavera, verano va a haber un aumento”, informó.

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Al ser consultado sobre si va a ser paulatino o de gran impacto el incremento del precio, Chiesa sostuvo que dependerá del plazo de las cámaras para recuperar el retraso del 50 por ciento.

Acerca de la crisis que sufrió el sector, el empresario enfatizó que el aumento de la carne también se asocia a la sequía: “En el primer semestre del año salió mucho más hacienda de lo que tendría que haber salido, por eso también soporta el precio bajo, pero no va a estar en el segundo semestre y se va a sentir el proceso de falta de mercadería para que se recompongan los precios”.

Sobre el impactó del factor climático en todo el país, el coordinador sostuvo: “Se estima que el año que viene por los porcentajes de preñés van a faltar 1.500.000 terneros para el engorde y eso te coloca en una situación de escasez por lo menos de 2 o 3 años, con lo cual el mercado va a estar tirante. Vos pensá que si tenés una faena de 12 millones de cabezas por año y te están faltando un millón y medio de animales para la próxima faena, eso te genera una tensión importante”.

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En esta sintonía, a fines de junio, el vicepresidente del IPCVA y de la Federación de Industrias Frigoríficas Regionales Argentinas (Fifra), Daniel Urcía, había apuntado: “Hoy estamos viendo una mayor oferta de hacienda, en parte, obligados por la situación de sequía. Esa mayor oferta conjugada con el poco poder adquisitivo, lleva a que haya oferta de carne e incluso aumente su consumo por los precios competitivos que tiene”.

Seguidamente, el dirigente empresario había señalado que “hasta la primavera esto se va a mantener así, porque el nivel de reposición de los animales en los corrales se mantuvo estable y eso indica que habrá estabilidad hasta septiembre”, cuestión por la cual sostuvo que el precio “se va seguir retrasando, porque no creo que en julio y agosto sean meses con variaciones”.

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En la misma línea, el presidente de la Cámara de Matarifes y Abastecedores (Camya), Leonardo Rafael, afirmó que “por dos o tres meses, no vamos a tener variación en los precios”, pero advirtió que “a partir de octubre o noviembre vamos a ver subas importantes. Quizá tengamos un reacomodamiento de entre el 30% o 50%”.

Por último, la Cámara de la Industria y el Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina (CICCRA) destacó que por la sequía, la faena de carne aumentó 20% en los últimos doce meses, lo que creó una sobreoferta de carne en el mercado interno que impide que los precios se adecuen a la inflación.

No obstante, advirtió que esta situación se revertirá para octubre, luego de llegado el fenómeno climático de “El Niño”, que producirá la retención de animales en los establecimientos productores.

“Esta retención reducirá drásticamente la oferta de carne en el mercado interno, por lo que los precios sufrirán fuertes aumentos, que estamos estimando en un 40%”, indicó el informe sectorial.

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