El ajuste que el presidente Javier Milei prometió aplicar sobre las provincias llegó antes de lo esperado: hay varias ciudades, como La Plata y localidades de San Luis, cuyas intendencias no cuentan con los fondos para pagar sueldos a los trabajadores estatales. La situación preocupa a gobernadores e intendentes de todo el país, que temen que esta crisis económica se agrave en los próximos meses.

El pasado martes, el intendente de La Plata, Julio Alak, anunció que los salarios se pagarían con dos días de atraso y de forma escalonada, según el monto. Como justificación de la medida, desde la Municipalidad platense informaron que las cuentas de la ciudad están comprometidas con el pago de duda que tomó el intendente anterior, Julio Garro, la cual asciende a $17.000 millones.

Sin embargo, desde el entorno de Alak aseguraron que la fecha de cobro –que solía empezar el último día hábil del mes a pagar– se postergó “por única vez”, e informaron el esquema en que se abonarán los salarios, donde se prioriza a los trabajadores de menores ingresos:

• Viernes 2 de febrero: se pagan los salarios de hasta $250.000.

• Lunes 5 de febrero: se abonan los sueldos de $250.000 hasta $400.000.

• Martes 6 de febrero: se liquidan los salarios de $400.000 a $800.000.

• Miércoles 7 de febrero: se pagan los sueldos superiores a $800.000.

El anuncio de Alak generó rechazo en los gremios que nuclean a trabajadores estatales y en Secretarías de la misma Municipalidad, donde se dispusieron medidas de fuerza –como un cese de actividades por dos horas– este miércoles y jueves.

Una situación similar se vive en la provincia de San Luis, donde los intendentes y presidentes comunales le reclaman al gobernador, Claudio Poggi, que –tal como hacía la anterior gestión– gire a las localidades los fondos que necesitan para pagar los salarios de los trabajadores estatales.

Ante esta situación, ATE San Luis realizó medidas de fuerza, como un corte de ruta, mientras que el secretario general del gremio, Fernando Gatica, detalló: “Aparte de la coparticipación habitual que se mandaba a los municipios, se enviaba una partida extra solamente con la finalidad de que se pagaran salarios a los municipales por encima de la línea de la pobreza”.

“Cuando empezó, el Gobierno de Claudio Poggi retiró esos fondos y, de un mes para el otro, las y los trabajadores, a quienes se les pagaba salarios por encima de la línea de la pobreza, cayeron debajo de la línea de la indigencia. El sueldo promedio en la provincia de San Luis pasó de estar en noviembre arriba de los $350.000, a quedar en un promedio de entre $150.000 y $200.000 pesos”, agregó.

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En declaraciones a medios, Gatica adelantó que ATE y la Defensoría del Pueblo presentaron una cautelar en donde pidieron que se habilite la feria judicial y que se obligue a que el gobernador pague los salarios de los estatales en un solo pago, y no de forma desdoblada como había anunciado a mediados de diciembre.

Asimismo, el gremio estatal denunció que más de 200 trabajadores –algunos inclusive de planta permanente– fueron despedidos “injustamente” de la Municipalidad de San Luis, donde el intendente es Gastón Hissa.