Por Aldo Battisacco, desde Buenos Aires (Enviado especial)

El ministro de Trabajo, Jorge Triaca, reveló que es decisión del gobierno la emisión de un bono de fin de año, y que se está trabajando con parte del gabinete para determinar cual será el alcance, sin olvidar que se priorizará «asistir a quienes más lo necesitan”.

Desde la cartera laboral manifestaron que reconocen la existencia de «una realidad compleja» que inquieta al Gobierno y a la sociedad, porque la pobreza «supera el 32%». Las prioridades están puestas en sectores de alta vulnerabilidad «como los beneficiarios de planes sociales, jubilados y los que tienen ingresos mínimos, sin desfinanciar al estado: Nación, provincias y municipios”, detalló Triaca.

Cuando se le recordó que el reclamo de la CGT es generalizado, el titular de la cartera laboral apuntó que «el escenario es muy heterogéneo entre quienes cerraron la paritaria entre marzo y mayo y entre los que la acordaron en agosto; y entre los que pautaron un bono de fin de año y los que no; así como tampoco es igual la situación de las empresas».

El titular del ministerio de Trabajo consideró que a su entender tiene «señales de que el peor momento ya pasó», pero que «aún gravitan fenómenos estacionales». Y vaticinó que desde el Gobierno creen que con «el impulso de la obra pública la construcción comenzará a crear empleos, algo ya se vio en septiembre”.

Triaca no omitió hacer mención sobre los proyectos que el Ejecutivo tiene en estudio para resolver los contrapuntos que tiene con los gremios por el impuesto a las Ganancias y dijo que la administración Macri «ya subió el mínimo no imponible», y agregó que también»ha prometido el envío al Congreso de una reforma tributaria el año próximo que incluye la exención de Ganancias».

Y añadió: «Se está estudiando si se puede excluir en diciembre para algunos tramos de ingreso”.

Hace poco menos de una semana, Jorge Triaca había advertido que no se tenían los montos para el bono de fin de año y que se daría un «plus», pero no precisó la cifra ni la fecha, según trascendidos la cifra sería de $ 1000 para el sector público y de $ 2000 para los privados.

Y se especuló que Macri podría firmar un decreto, como hizo Eduardo Duhalde en 2002. En tanto que para el sector privado el Ejecutivo llevaría un escrito a la mesa del diálogo social que sería convocado la semana próxima.