El Gobierno nacional, provincial, el gremio de lecheros y las cámaras empresarias acordaron hoy un plan de salvataje de la empresa SanCor, mediante el cual la Nación enviará un crédito estatal por 450 millones de pesos, una rebaja en el aporte mensual de la patronal a la obra social del sindicato y modificaciones en el Convenio Colectivo de Trabajo.
De la firma participaron los ministros de Agroindustria, Ricardo Buryaile y de Trabajo, Jorge Triaca y representantes de la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina (ATILRA), el Centro de la Industria Lechera (CIL) y la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas Lácteas (APYMEL).
Con el compromiso de las partes, se acordó la modernización del Convenio Colectivo del sector y un recorte del aporte patronal permanente, con el propósito de impulsar el desarrollo y la competitividad de la industria láctea.
El Gobierno Nacional anunció que asistirá financieramente a SanCor Cooperativas Unidas en el marco de un plan de reestructuración sustentable que permita su desarrollo, indicó un comunicado.
Con la firma del convenio, cesó el paro de actividades iniciado anoche en todas las plantas lácteas del país.
«La medida de fuerza que hizo AILRA fue clave para que las partes tomarán verdadera conciencia de la gravedad de la situación», indicó el secretario general del gremio de los trabajadores de la industria lechera, Héctor Ponce al salir del Ministerio.
Buryaile explicó que el Gobierno entregará el fondo de 450 millones de pesos para ayudar a la cooperativa láctea a cambio de una rebaja en el bono extraordinario que cobra el gremio y que va destinado a la obra social.
El funcionario prometió «un nuevo convenio colectivo de trabajo» tras el acuerdo por SanCor.
Expresó que «sobre el famoso punto del bono, el sindicato aceptó una rebaja entendiendo la realidad: no solamente estaba en juego SanCor, sino también la industria lechera argentina y la producción láctea argentina».
«Vamos a desembolsar 450 millones de pesos que van a ir a un fideicomiso, porque SanCor se tiene que hacer responsable del desmanejo que ha tenido y el Estado no puede ser el Pagadiós de siempre», aseguró en declaraciones radiales.
Afirmó: «tendrá que hacer su reestructuración; hay gerentes de SanCor que ganan por encima de 400 mil pesos y que no han estado a la altura de las circunstancias para conducir la compañía».
«SanCor es una empresa importante más allá de la situación que vive», dijo y agregó que lo que necesita «es un manejo adecuado para que los productores confíen y salde la deuda con ellos». Destacó que «lo más importante es que ahora Sancor dé una muestra de austeridad y de estar a la altura de la crisis».
El gobernador de Santa Fe, Miguel Lifschitz, advirtió que el auxilio financiero que el Gobierno nacional otorgó a la cooperativa SanCor «se demoró demasiado y esto produjo perjuicio adicional a la empresa de más de 200 millones de pesos».
Según el mandatario provincial, esa cifra es producto de «las pérdidas sufridas (por la compañía) en estos 60 días de negociaciones».
Mientras que el secretario de la Mesa de Productores Lecheros de Santa Fe, Marcelo Aimaro (Meprolsafe), manifestó que en SanCor debe haber una «reestructuración profunda, es un proceso que puede llevar un tiempo».
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