El Gobierno Nacional dispuso que noventa mil efectivos militares y policiales, se desplegarán en toda la Argentina para garantizar la seguridad de las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO).

El general Carlos Pérez Aquino deberá monitorear el transporte de las urnas a los centros de votación, la seguridad en las mesas electorales y la remisión de esas urnas al Congreso para su escrutinio definitivo.

En diálogo con Infobae, el general Pérez Aquino reveló que su estado mayor será integrado por 70 efectivos -hombres y mujeres-de las tres fuerzas armadas que cumplirán distintas tareas de supervisión y control.

Los efectivos de seguridad estarán recogiendo las urnas desde la puna a lomo de mula a Tierra del Fuego bajo la nieve, custodiando así las escuelas desde muy temprano hasta que concluyan los comicios en todo el país.

«Todo el personal militar destacado en el terreno ha sido conveniente entrenado. Si hay disturbios menores, como proferir una consigna partidaria o exhibir un distintivo político, son contravenciones que normalmente se solucionan con el retiro del infractor del recinto del comicios y su entrega a las autoridades policiales respectivas. Si los desordenes fueran mayores, hay un sistema de proporcionalidad en el accionar del personal y llegado el caso, el militar de mayor jerarquía en el lugar tiene la posibilidad de solicitar ayuda extra o recibir instrucciones», explicó Pérez Aquino.

El general de división reveló que habrá dos comandos para preservar la seguridad de las PASO: «Esta sala de control en la que nos encontramos (Piso 14 del Edificio Libertador), está replicada hasta el último detalle en una locación de Campo de Mayo. Si por cualquier circunstancia tuviéramos que abandonar este puesto de Comando, tenemos un puesto de comando móvil que nos permite seguir coordinando las operaciones mientras nos trasladamos hacia el puesto de comando alternativo».