Por Marcelo Chibotta

Dueña de una sonrisa casi permanente, que deja por momentos de lado cuando habla de los temas que atañen a su función y a la actividad política, la concejala Norma López desmenuzó algunos temas durante una entrevista con Conclusión.

Prácticamente sin reparos a la hora de criticar al socialismo, la edila del bloque Frente para la Victoria se refirió al problema del delito en la ciudad, como así también su visión sobre la composición del actual concejo y de la performance electoral del peronismo rosarino durante las últimas elecciones.

En el inicio de la charla, López fue directo al corazón del tema más preocupante en la ciudad, la proliferación del delito y las medidas para ponerle freno que se debaten en todos lados, y especialmente en el Concejo del cual forma parte: “La convocatoria de la intendenta fue poco amplia, no porque no estén representadas las autoridades del Concejo y de la comisión de Seguridad, sino porque se necesitaba tener un gesto de amplitud política en este momento y convocar a todos los sectores políticos y a las organizaciones que habitualmente trabajan en los territorios”.

“No estoy de acuerdo con el nombramiento de los jueces de falta, yo haría más hincapié en la formación de los inspectores”, consideró López sobre una de las propuestas del Ejecutivo para después señalar que “lo de la impresión de los números de patentes en los cascos es una estigmatización y no va a servir para nada. Vemos esto con preocupación y nos pasa que cuando uno advierte cerca nuestro una moto, se sobresalta, pero la mayoría de los usuarios de motocicletas son trabajadores que la necesitan porque además hay un sistema de transporte malo”.

En cuanto a la utilización de las video cámaras, López indicó que “tiene que ser en un sistema integrado y la persona que las maneje y controle sus imágenes tiene que tener puesto el ojo en la prevención del delito. No vamos a acompañar el hecho de que se puedan cobrar multas por cualquier infracción”.

En otro sentido, y más allá de las discusiones de coyuntura, la edila del Frente para la Victoria indicó: “En general, creo que con todo esto quieren cambiar el eje sobre la implicancia y la responsabilidad que tienen el gobernador y el ministro de Seguridad y poner el ojo en políticas sobre las cuales nosotros no podemos dar directivas ni a la policía ni al ministerio”.

Ya en otro tema, más precisamente dentro de lo que se refiere al tema económico, la concejala kirchnerista aseguró que coincide “con la mirada que tiene el socialismo al respecto de que el presupuesto municipal tiene que poner énfasis en la cuestión social. Avanzamos en esas situaciones, pero después ellos propusieron un diseño y generaron unas normativas que han implicado que muchas empresas decidieran irse de la ciudad de Rosario”.

“Ahora que me digan si están mejor con el macrismo cuando no articulan políticas”, desafió. Para después agregar: “Les prometieron que le iban a dar dinero de la Anses y no se lo dieron. Y además de eso, con todas las medidas que van a afectar directamente a Rosario y a la provincia de Santa Fe, con la caída del empleo y del consumo al no protegerse el mercado interno. En eso el municipio tiene cosas para hacer”.

Luego de azuzar con crudeza a la gestión del Frente Progresista, la edila del Frente para la Victoria respondió la pregunta al respecto de cómo ve la composición del Concejo que se conformó en diciembre:Hay una renovación generacional, además de la inclusión de fuerzas que no tenían representación legislativa como la izquierda más tradicional que representa Celeste Lepratti y con una izquierda con otras características como la que representa Ciudad Futura”.

“Por el otro lado, tenemos bloqNorma Lopez 2ues como el del PRO, que es muy conservador y está absolutamente consolidado. No es que éste sea un mejor Concejo, es diferente a partir de la incorporación de aquellos que forman parte de la renovación generacional, donde hay una puja permanente entre sectores conservadores con aquellos más progresistas o más dinámicos”, consideró.

Más adelante, cargó nuevamente las tintas sobre el partido de la rosa: “Lo que sí veo como un retroceso es que el socialismo está atado a las decisiones del PRO. No logran salir de esa lógica, no implementan otro tipo de relaciones ni tienen diálogo político con el resto de los bloques a pesar de que en algunas miradas más sociales hasta podríamos llegar a coincidir. En este sentido eligen al PRO que representa lo que es Mauricio Macri, es decir, menos empleo, menos consumo y un mercado interno desgastado con promesas que realmente lo que hacen es dejar a gente en la calle. El Concejo es un ámbito de debate y de propuestas pero la gestión municipal ha decidido quedar atada a la decisión del PRO”.

—¿Cómo analiza la derrota del Frente para la Victoria frente a una fuerza política nueva como es Ciudad Futura?

—En realidad es la misma representación, porque ingresaron tres cargos legislativos por cada fuerza política. Ciudad Futura aparece como algo distinto, por eso la gente lo vio, sobre todo un sector de la juventud, pero creo que tiene que ver en el marco de aquellos sectores que no provenían del Justicialismo y que sí participaron activamente de la campaña “Macri No”. Respeto el trabajo que han hecho, que han consolidado en sus espacios de referencia… hay que ver como continúan ahora. Sin embargo, me parece que Ciudad Futura aparece como un sector progresista, dinámico y nuevo y habrá que ver como en esta instancia la sociedad va a elegir sus representantes.

—Esas son valoraciones positivas de Ciudad Futura, pero ¿qué fue lo que no supo hacer el peronismo para perder ante esa fuerza política?

—Quiero insistir en que Ciudad Futura logró los mismos escaños que el peronismo…

—Pero sacó más votos…

—La incorporación de sectores que no provenían del peronismo o de las estructuras más tradicionales que formaron parte del kirchnerismo, tuvo una distinción que hizo que sobresaliera a muchos de los que veníamos haciendo propuestas para que el peronismo consolidara una mayor cantidad. Hay que analizar esto en el contexto de lo que significa la política en general. El socialismo viene perdiendo adhesión de la ciudadanía, tiene el desgaste lógico de quien hace 20 años que está en el poder y de quien también tiene falta de propuestas superadoras. Lo que vienen haciendo es porque tampoco pueden superar los errores. En ese marco, la sociedad ha producido algunos cambios, hay que ver en el devenir cómo los jóvenes de Ciudad Futura consolidan su propuesta ahora que el kirchnerismo o el Frente Ciudadano aparece con otra dinámica, sobre todo ahora que Cristina ha salido nuevamente… Cada vez que sale, marca la agenda política del país.

—En caso de que se lleve a cabo la reforma constitucional, ¿qué aspectos considera importantes para que puedan ser incorporados en la misma, principalmente en beneficio de la ciudad?

—Primero todo lo que significa defender el derecho de los usuarios y consumidores, como por ejemplo frente a los tarifazos. Hay instancias que necesitamos mejorar para las cuales no es necesario hablar de una reforma constitucional, como por ejemplo el tema de consolidar un Estado para que el ciudadano sea un participante activo para poder sostener sus derechos. El tema de la educación recién ahora se empieza a discutir. Después, algunos institutos de los nuevos que están consagrados en la Constitución del 94 y en los que la Constitución de la provincia no se ha aggiornado, como por ejemplo en el de la autonomía municipal. Luego, habría que incorporar todo lo que signifiquen los ejes de transparencia, me parece que pueden ser cuestiones importantes a tener en cuenta.

—A partir de la propuesta de reforma constitucional se abre necesariamente el camino de la reforma política. Más allá de si la misma alcanzará o no rango constitucional, hay un tema que es relevante y es el de la representatividad. En ese sentido, ¿qué opina al respecto de la elección de concejales por territorio?

—Hay que ver si es por barrios o por seccionales… La representatividad que tiene ahora un concejal es una representatividad general. Si podemos elegir representantes por territorio, me parece una importante avanzada sin quitar la otra representatividad porque siempre hay intereses que son comunes a todos los territorios. Si no, uno se convierte sólo en defensor de ese territorio. Hay experiencias y distintas formas de hacerlo como por ejemplo es la de Buenos Aires que tiene las comunas. Me parece que tenemos que avanzar en ese sentido porque una de las cuestiones que vemos en Rosario, es cómo la gestión del socialismo ha destruido en estos últimos 20 años la representatividad que tienen muchos vecinos que por ejemplo en la década del 90 la tenían con las vecinales, después la tuvieron a través del Presupuesto Participativo. Ahora está en disputa el hecho de saber cuáles son las organizaciones que pueden quedarse con la representatividad, porque tiene que ver con la fragmentación de la participación que tiene el ciudadano. La verdad es que el desgaste que sufrieron las vecinales y el Presupuesto Participativo, fue producto de la intención de desgastar a través del direccionamiento que le dio el socialismo, orientado a garantizar sus políticas y no las políticas que quiere el ciudadano.