Este lunes, la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, arribó a la ciudad de Rosario con el objeto de presentar, junto al gobernador Maximiliano Pullaro y el intendente Pablo Javkin. el plan «Bandera», el nuevo proyecto con el cual buscarán combatir la inseguridad y el delito en la provincia y particularmente, en Rosario y Gran Rosario.

Tras un breve discurso oficial, la funcionaria describió la situación de Rosario: «Rosario ha avanzado en los últimos años en lo que nosotros llamamos una policriminalidad ,donde no solamente hay estupefacientes, hay lavado, hay otro tipo de delitos y también hay lucha por el territorio y sicariato. Esto implica que al avance de las modalidades delictivas, el avance del Estado nacional y el Estado provincial sea una tarea que vaya por delante y no por detrás del avance del delito».

Bullrich precisó cual será la tarea junto a Javkin y Pullaro: «Vamos a aumentar los niveles de operatividad, incrementar entre un 20 y un 25% los efectivos federales en tareas que van a estar determinadas, pero también en reuniones diarias para ir analizando en inteligencia criminal cómo está avanzando el delito».

«También quiero plantear que estamos por cerrar en estos días la posibilidad de que la provincia tenga la potestad sobre la cárcel de Coronda y, de esta manera, abrirla rápidamente para poder mudar presos y lograr que los presos que están en comisarías dejen de estar allí y tenga más operatividad la policía de Santa Fe», mencionó como otro objetivo.

«Tanto las Fuerzas Federales como las Fuerzas Provinciales muchas veces caen en situaciones en las que, habiendo realizado su tarea de manera correcta, hay algún juez que no lee con precisión la ley y lo que hace es condenar a la autoridad en vez de condenar al delincuente. Esta legítima defensa reforzada es un mecanismo que va a permitir a las Fuerzas de Seguridad tanto provinciales como de todo el país trabajar sabiendo que si disparan no están poniendo en peligro su libertad, sino que están privilegiando a la sociedad, siempre y cuando lo hagan, por supuesto, en el marco de la ley y de los protocolos existentes», agregó.

Además, precisó detalles sobre el Plan Bandera: «Se pone en marcha el día de hoy. El gobernador Pullaro y yo misma somos los que vamos a llevar adelante esto, en el marco de la ley de seguridad interior, y va a haber un delegado del Ministerio de Seguridad de manera permanente junto a los jefes de las Fuerzas Federales, que van a estar aquí para que la operatividad esté realmente cada día más aceitada y para que vayamos moviendo las fuerzas».

Por otro lado, no brindó precisiones sobre la cantidad de agentes que prestarán servicio en la ciudad. 

«El Gobernador tiene una decisión política inquebrantable y nosotros desde el Gobierno Nacional también creemos que cuando está la decisión y se trabaja con fuerzas decididas a combatir el delito, el delito baja», indicó.

A su vez, el gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, sostuvo: «No se veían los efectivos federales ni los efectivos provinciales por una multiplicidad de causas, por falta de ordenar los recursos humanos, los recursos logísticos, los recursos financieros. Ahora va a haber un Comando Operativo Conjunto que vamos a conducir el Ministro de Seguridad y yo, va a haber un diseño operativo diario y va a haber un control operativo diario».

«Vamos a trabajar para superar los 100 agentes antes de fin de año y llegar en el primer trimestre a los 200 móviles operativos», informó como principal novedad en el corto plazo para Rosario.

En torno a cómo se van a organizar las Fuerzas Federales, manifestó que «va a haber un Comando Operativo Conjunto en donde primero se va a cubrir una malla. Las Fuerzas Federales van a ser un refuerzo a lo que hace la malla de trabajo de prevención de las Fuerzas Provinciales. Además, están las fuerzas, las unidades operativas e investigativas y de inteligencia criminal de las Fuerzas Federales, que van a llevar adelante un trabajo coordinado por la Justicia Federal y la Justicia Provincial en las diferentes investigaciones».

«Esto va a traer primero una disminución del delito contra la propiedad, el delito predatorio, porque va a haber personal policial y de las Fuerzas Federales en la calle, trabajando coordinadamente. Y en segundo término, un golpe permanente a las organizaciones criminales complejas que se han instalado prácticamente en Rosario», concluyó.