«Nos quieren involucionar al país feudal del siglo XIX»

Por Carlos Andrés Ortiz

Resulta muy ilustrativo citar las medidas de gobierno, que implementarán, si los neoliberales y sus vinculados ideológicamente (libertarios y otros ultra conservadores reaccionarios), vuelven a cooptar el poder formal; las que fueron clara y expresamente dichas, pero que por ser “inconvenientes” a los fines electorales, los medios concentrados se ocuparon de ocultar, después que fueron difundidos en claras versiones de sincericidio político.

A diferencia de 2015, cuando prometieron mejoras socio económicas e implementaron adrede severos deterioros; para 2023 ya dijeron las medidas que quieren perpetrar, las que se citan seguidamente.

Eliminación del aguinaldo, vacaciones pagas e indemnización por despido, volviendo a las tristes épocas de sectores patronales todopoderosos y empleados carentes de elementales derechos de protección al trabajo, como era el sistema laboral semifeudal anterior al peronismo, en Argentina.

Respecto a lo precedente, exacerbación del más deshumanizado clasismo, en muchos casos teñido de racismo, como lo expresó el vocero del libertarismo (que es neoliberalismo exacerbado): “quien quiera trabajar tendrá la total libertad eligiendo entre trabajar por el salario que le ofrezcan, o morirse de hambre”.

Tal como lo dijeron con todas las letras, el proyecto del neoliberalismo local, es volver a la “Argentina ‘añorada’, aquella concentrada en producir alimentos y otras materias primas”, como lo éramos en el hoy caduco e inviable modelo de país – estancia, del siglo XIX. Lo que añoran son los abusivos privilegios típicos de los patrones de estancia, de aquel modelo político – económico feudal, apenas revestido de meras formalidades pseudo democráticas, que funcionaba como furgón de cola del Imperio Británico. Nada les importa que, en ese esquema, hoy sobramos 27.000.000 de argentinos (o incluso más), pues “el campo” da trabajo a muy pocas personas, por lo general muy mal pago y con altos porcentajes de trabajadores en negro; además de las peligrosas limitaciones geopolíticas que esa débil economía primaria significa. Tal es la involución forzosa que, de mínima, quieren implementar forzosamente y al como sea, los neoliberales que quieren manejar una feroz dictadura con meras formalidades pseudo democráticas, por parte de los grupos del poder financiero concentrado local, subordinados al poder financiero globalizado mundial.

Pero el real objetivo de máxima, de los reaccionarios y muy violentos neoliberales locales, es perpetrar la implosión balcanizadora de Argentina, haciendo desaparecer a nuestra nación, destrozándola en media docena o más, de pequeñas, ingobernables e inviables republiquetas, tal como es evidente que resulta el plan de acción, sin prisas pero sin pausas, de los poderes supranacionales, que operando a través de o en concomitancia con el Bloque de Poder Atlantista, buscan la desaparición de los Estados nacionales, poniendo especial énfasis en aquellos que por sus extensiones geográficas importantes y por otras potencialidades significativas, les interesa desarticular antes que logremos desarrollarnos sin subordinarnos a esos poderosos factores de Presión Económica y Geopolítica, que tras bambalinas mueven los hilos para intentar monopolizar el Poder Mundial. Y como sucede en otros órdenes, en esto, las “progresías”, con sus irracionales discursos ultra indigenistas, ultra ecologistas y otros, son totalmente funcionales a las operaciones destructivas de los neoliberales y otros sectores reaccionarios antinacionales.

Respecto a las acciones para balcanizar Argentina en múltiples republiquetas, cabe recordar la vergonzosamente cipaya iniciativa del exgobernador mendocino Alfredo Cornejo, de independizar Mendoza de Argentina, la cual contó con el silencio cómplice de todo el macrismo y sus subordinados radicales, además de los apoyos de algunos embajadores extranjeros, desubicadamente involucrados en estos temas. También desde el “progresismo” apátrida, apoyan el separatismo indigenista, el cual opera con libreto dictado desde Gran Bretaña, siendo el caso más exacerbado y peligroso el de los “mapuches” araucanos, de discursos violentos e “independentistas”.

Como los neoliberales de hecho desprecian visceralmente al patriotismo, y se burlan aviesamente de todo concepto de soberanía, se mofan de las enormes importancias estratégicas de YPF, AA (Aerolíneas Argentinas) y otras esenciales Empresas del Estado, respecto a las cuales ya dijeron que -siguiendo dogmatismos antiestatistas- las quieren volver a privatizar, y sobre todo extranjerizar. Por supuesto nada les importa que sin YPF manejada por el Estado, no se habría podido avanzar con sentido Nacional en el desarrollo del mega yacimiento hidrocarburífero de Vaca Muerta; y sin AA, no habríamos tenido capacidad operativa para traer los grandes cargamentos de vacunas, esenciales para afrontar la crisis sanitaria del COVID. Tampoco les importa a los personeros del neoliberalismo, que AA facilite la conectividad interna…total los agrogarcas y similares suelen moverse en aviones propios.

Vaca Muerta

Quieren arancelas las Universidades Nacionales, para que vuelvan a ser coto cerrado de oligarcas y sectores excluyentes vinculados. Incluso, algunos “talibánicos” neoliberales, afirmaron querer cerras las Universidades Nacionales.

Tal como es una constante de gobiernos elitistas, la educación pública no les interesa, por lo que de seguro operarán para desfinanciarlas y degradarlas.

Lo mismo quieren hacer con la Salud Pública, pues con criterio excluyente, solo la consideran “un gasto”, con nula sensibilidad social, pues incluso el personero mayor del neoliberalismo, dijo, refiriéndose a la epidemia de Covid, “el que se tenga que morir, que se muera”.

Con toda certeza, volverán a paralizar las grandes obras de infraestructura, excepto algunas en la Capital Federal o la Pampa Húmeda, pues el resto de nuestro territorio no solo no les interesa, sino que lo desprecian abiertamente.

Como lo dijeron con total claridad y cinismo, buscarán destruir todo el sector industrial, y desarticular a todos los entes tecnológicos, sobre todo los de avanzada, como el nuclear y el satelital, como en parte ya lo hicieron en el período tan nefasto 2015-2019.

Por el perverso accionar de desinformación activa, perpetrado a diario por los medios concentrados, muchos argentinos no tienen ni idea de estos serios peligros que se ciñen amenazando gravemente el futuro de nuestra nación.

Mgtr. Carlos Andrés Ortíz

Analista de Temas Económicos y Geopolíticos