La inflación en el conjunto de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) se ubicó en mayo en un promedio de 6,5% interanual, nueve décimas menos que en el mes anterior, informó el organismo, alcanzando así el menor nivel desde septiembre de 2021, año en el que comenzó la escalada inflacionaria.

En mayo la inflación en el bloque de 38 estados alcanzó a 6,5% anual, registrándose bajas en todos los países del conjunto, con la excepción de Países Bajos, Noruega y Reino Unido. De todos modos, el nivel de precios entre los países del organismo es dispar: en Costa Rica, Grecia y Dinamarca se ubicó por debajo de 3% anual; mientras que en Hungría y Turquía registraron 21,5% y 39,6%, respectivamente.

El indicador núcleo o subyacente, que excluye los valores de los alimentos y la energía, promedió 6,9% en mayo, dos décimas menos que en abril, indicó el organismo con sede en Paris. Esto significa que este índice, en la mira de los principales bancos centrales a la hora de decidir continuar o finalizar la suba de tasas interés, continúa mermando, pero lo hace a un menor ritmo que el dato general. Esto es precisamente lo que llevó a que la Reserva Federal (FED) y el Banco Central Europeo (BCE) anticiparan nuevas subas de tasas en los próximos meses.

Los servicios, uno de los principales componentes de la inflación núcleo, cayó de 6% a 5,7% anual en mayo. Por otro lado, los precios de la energía, uno de los principales motorizadores de la inflación al comenzar la escalada, cayó a 5,1% anual, y 0,7% mensual, aunque sigue ubicándose por encima del 10% en Letonia, Italia, Republica Checa, Colombia y Hungría.

En lo que respecta a los alimentos, los precios continúan ralentizándose, totalizando 11%, tras el 12,1% de abril. Entre los diversos bloques de países miembro, la inflación en el G7 se ubicó por debajo del índice general, bajando de 5,4% en abril a 4,6%.

Todos los países del grupo de potencias registraron bajas respecto a abril, con excepción de Gran Bretaña, país que sufrió un alza también en la inflación núcleo.

Precisamente los componentes núcleo fueron los principales impulsores de la inflación en todos los países del G7, con excepción de Italia y Japón, donde la energía y los alimentos continúan siendo los principales aportantes.

En la Eurozona

En los 20 países de la Eurozona, la inflación bajó de 7% a 6,1%, y el indicador adelantado publicado por Eurostat anticipa una nueva caída de 5,5% en junio.

En este caso, nuevamente, hay una gran variabilidad entre los países: mientras que en Alemania la inflación subió a 6,8%; en España se situó en 1,9%, una cifra incluso menor a la meta del 2% anual a la que aspira el BCE.

Por último, entre los países del G20, la inflación bajó de un promedio de 6,5% en abril a uno de 5,9% en mayo, con caídas en Brasil, India y Sudáfrica, e incremento en Argentina.