La deuda de Estados Unidos aceleró sorprendentemente en estos últimos meses al verificarse que la misma subió un billón de dólares en 100 días; cifra difícil de mensurar y suficiente como para que los activos como el oro y el bitcoin se coticen en torno a máximos históricos, según refirió el Bank of America Corp.
La deuda traspasó los 34 billones el 4 de enero después de haber cruzado la marca el 29 de diciembre, según los datos tomados del Departamento del Tesoro. El 15 de junio de 2023 había alcanzado a 32 billones y el 15 de septiembre superó los 33 billones, describiendo así el ritmo acelerado que lleva desde mediados del año pasado.
Por ello, el dinero que el Gobierno federal pide prestado para cubrir los gastos operativos, según los cálculos de su evolución, llegará a los 35 billones después de exactamente 95 días.
Si bien la deuda norteamericana siempre rondó por cifras estratosférica y aun así la nación más poderosa de la tierra persistentemente sortea los pronósticos más amenazadores, el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, señaló recientemente que la deuda es “insostenible”.
