Un fuerte terremoto de magnitud 6,2 sacudió este viernes por la tarde el oeste de Japón, señaló el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), tras revisar a la baja una magnitud inicial de 6,6.

El aeropuerto regional dejó de operar hasta nueva orden, según la cadena de televisión pública NHK, uno de cuyos periodistas en la zona dijo haber sentido réplicas.

«Notamos sacudidas bastante fuertes, creo que las más fuertes en años», dijo un funcionario de la prefectura de Tottori, Suminori Sakinada, interrogado por la AFP.

«Por el momento, hay ocho heridos con lesiones leves», detalló NHK, que interrumpió inmediatamente su programación habitual para dedicarse a la cobertura del terremoto.

«El número de emergencias, el 119, recibió numerosos llamados», señaló la agencia Kyodo.

En las próximas horas y días podrían producirse algunas réplicas que dañarían edificios y construcciones ya fragilizados por el primer seísmo.

«Trabajamos en estrecha colaboración con las localidades afectadas y ordenamos que las informaciones sobre la evacuación y los daños sean comunicadas lo más rápidamente posible a los ciudadanos», escribió el primer ministro Shinzo Abe en su cuenta de Twitter.

Se produjeron varios incendios y al menos una casa se derrumbó, indicó la cadena NHK que, a través de su red de cámaras automáticas que se activan con los terremotos, logró rápidamente emitir imágenes de edificios en Tottoti moviéndose con fuerza.

El terremoto se sintió en la mitad de la isla de Honshu, hasta Tokio.

No se ha constatado por el momento ninguna anomalía en las instalaciones nucleares situadas en las regiones afectadas, según la NHK y la página web de la Autoridad de Regulación Nuclear.