El Sindicato Único de los Trabajadores de Peajes y Afines (SUTPA), se declaró en «estado de alerta y movilización», tras enterarse por los medios, que por decisión de un proyecto del Gobierno se eliminarían cabinas de peajes dejando a unos 2.500 trabajadores sin su fuente de trabajo.

A partir de gestiones con representantes del Ministerio de Transporte de la Nación y Vialidad Nacional se llegó a la conclusión de conformar una mesa de diálogo para resguardar los empleos. «Luego de ambos encuentros, el SUTPA logró ser el único gremio que formará parte de la negociación para discutir un proyecto que atenta contra la fuente laboral de 2500 familias. Es indispensable que estemos sentados en la mesa donde se discutirá el futuro de los corredores», señalaron mediante un comunicado.

Y agregaron: «Hemos sido los primeros en denunciar el mal estado de la infraestructura de las rutas y los accesos, y entendemos la necesidad de las obras, pero estas mejoras no deben engrosar los índices de desempleo en un país con el 35% de trabajo informal y más del 30% de pobreza». El Ministerio de Trabajo será quien intercederá actuando entre las dos partes, Vialidad Nacional y el gremio.

Por otro lado, otro tema que también preocupa a los trabajadores es la aplicación del programa de Participación Público Privada (P.P.P) que está previsto para las licitaciones de concesiones de estos corredores nacionales. «La ejecución del proyecto que propone rutas seguras a través de la P.P.P, no sólo amenaza con dejar sin trabajo a 2.500 familias sino que además atenta contra las Pymes, la mano de obra nacional, y expone al estado a ser garante del privado, para asumir los riesgos que puedan surgir a futuro. Esta ley no sólo beneficia el ingreso de capitales extranjeros, sino que además excluye casi en su totalidad a la industria Nacional», concluyeron.