Ante el cierre de la Clínica porteña de porteña de los Virreyes, un total de 400 trabajadores fueron notificados de palabra que su lugar de trabajo busca cerrar sus puertas. El lunes habría audiencia con las autoridades de Trabajo que disponga el nuevo Gobierno y representantes de ATSA.

El pasado miércoles, la Clínica privada de los Virreyes que se encuentra ubicada en el barrio porteño de Belgrano anunció su cierre a sus trabajadores, que se encuentran de paro desde hace semanas por salarios impagos.

En un marco de total incertidumbre, jefes intermedios prometieron indemnización para todos, pero los trabajadores lejos están de sentirse conformes, dudan, reclaman su empleo y temen el vaciamiento de las instalaciones.

Estuvimos de paro todo el mes, todavía nos deben plata de octubre y el sueldo de noviembre. Ayer a la mañana se acercó la directora médica Patricia Rodríguez, nos dijo que venía de hablar con los accionistas, que le dijeron que iban a cerrar la clínica, que hoy al mediodía venía con los abogados para explicarnos cómo seguía la situación”, relató uno de los empleados afectados.

Durante la tarde del jueves, se acercó el jefe de personal, al que no conocían, y les dijo que “el cierre es inminente” y que el lunes habrá una audiencia con el ministerio de Trabajo y el sindicato de Sanidad ATSA, en donde se dejarán asentados los pasos a seguir.

Dijeron que iban pagarnos, entre muchísimas comillas, bajo el artículo 245 de la Ley de Contrato de Trabajo, y que en diciembre iban a ser los pagos”, detalló el empleado.

El recién presentado como jefe de Personal se fue abucheado. “Por más que nos prometa la plata nosotros queremos trabajo. Tenemos compañeras que están hace 25 años ahí”, concluyó.

Los trabajadores se organizaron para dejar compañeros en la clínica las 24 horas para evitar su vaciamiento. Mientras tanto, esperan novedades.