SáBADO, 30 DE NOV

«Alquilar locales o viviendas sin riesgo de desalojo o cierre implica destruir la matriz especulativa»

El titular de la Federación Nacional de inquilinos dejó en claro que el modelo especulativo, el lavado de dinero volcado a la construcción de viviendas, cocheras o locales comerciales, desnaturalizó la convivencia social, y dejó en píe un mercado inmobiliario dolarizado y desregulado.

Por Aldo Battisacco – Enviado especial a Buenos Aires

El referente de la Federación Nacional de Inquilinos, Gervasio Muñoz dialogó con Conclusión y explicó cuáles son las limitaciones que aherrojan la posibilidad de pactar alquileres justos, sin riesgo que esto implique el desalojo de una vivienda o el cierre de un local comercial por causas económicas, pero fundamentalmente por el uso especulativo que se hace de los inmuebles al valuar la venta y el alquiler de acuerdo a reglas del mercado en la que incide el dólar.

Muñoz desarrolló los condicionantes que operan el mercado inmobiliario, e indicó que las organizaciones de inquilinos de todo el país, proponen incorporar a la Ley 27.551 un artículo que establezca que «en todos los supuestos, los alquileres se establecerán en moneda de curso legal al momento de concertarse», es decir en pesos.

Para el dirigente de Inquilinos Agrupados la iniciativa indica que «será nula, sin perjuicio de la validez del contrato, la cláusula por la cual se convenga el pago en moneda que no tenga curso legal; en este caso, el precio quedará sujeto a determinación judicial», sea para casas, departamentos o locales comerciales.

Hace pocos días, se dio a conocer el impacto que sufre el sector comercial, de servicios y productivo, y que consigna que se duplicó el cierre de locales en el microcentro porteño. Distintas organizaciones que nuclean a comerciantes de la zona de Florida y Lavalle plantearon que se está incrementando el cierre de locales, la ola no para y hay riego que esto «se profundice». El temor de la interrupción de los ATP generó desazón y desesperación.

Para los comerciantes, es de suma importancia que el Estado no interrumpa la ayuda y promueva medidas que inciten al consumo, ante una marcada retracción de la demanda producto de la crisis económica y sanitaria. Desde que se flexibilizó la apertura de locales, no se supera el 35% de ventas si se lo compara con los números de la prepandemia.

No hay cámaras de comercio que defiendan los intereses de los comerciantes que alquilan

De la charla que mantuvo este medio con Gervasio Muñoz, emerge como dato relevante que el incremento de las tarifas, el costo de los alquileres y la imposibilidad de que los trabajadores equiparen la inflación a través de las paritarias, se ha convertido en factores negativos -además de la crisis- para poder dar un fuerte impulso al consumo interno.

Muñoz, apuntó que «no hay cámaras de comercio que defiendan los intereses de los comerciantes que alquilan» y agregó que la iniciativa de promover un proyecto que contemple que no se puede contratar en moneda extranjera, «es para todos los contratos, porque impacta en el precio de los alquileres de departamentos y locales».

«Quien construye departamentos o locales, porque sabe que la rentabilidad es en dólares, termina impactando en el diseño de las políticas de alquiler de la ciudad, el gran déficit que hay para desdolarizar la renta en Argentina se nota», señaló Muñoz, al tiempo que agregó que «en las pymes se da con más asiduidad, aunque la incidencia del alquiler es más baja, si carecen de una organización que defienda la posición de la pymes que alquilan».

Los comerciantes plantean baja del consumo y la imposibilidad de pagar alquileres, pero no hacen propuestas para regular las condiciones de contratación de los locales comerciales

«Los comerciantes plantean baja del consumo y la imposibilidad de pagar alquileres, pero no hacen propuestas para regular las condiciones de contratación de los locales comerciales, frente a un mercado desregulado. Es un problema muy grande, pero adolecen de la organización que se necesita para encarar la batalla que tienen que dar», dijo el especialista.

En la misma línea, Muñoz analizó que si se «tiene dolarizado el suelo, las consecuencias están a la vista», como en el caso de los inquilinos de viviendas destinadas para vivir, porque «los asalariados deben destinar el 50% de sus ingresos para pagar un alquiler».

A todo esto, los últimos tiempos suma «una nueva maniobra de los especuladores, cada vez más frecuente, como lo es la exigencia a los inquilinos de firmar contratos en dólares».

El diputado nacional del Frente de Todos, Federico Fagioli, presentó en la Cámara baja un proyecto de ley que prohíbe la celebración de contratos de alquileres de viviendas en dólares, que Muñoz rescató, ya que son necesarias «medidas urgentes y otras estructurales», entre tantas, «la prohibición de los contratos en dólares es fundamental».

«Los problemas sociales son ocasionados por las distorsiones del mercado, la falta de controles y la ausencia de espacios en el Estado que le de rango institucional al problema inmobiliario», manifestó Gervasio Muños.

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