Llegaron cinco nuevos respiradores a Rosario y ya suman 430 en total
La ciudad continúa preparándose en la pandemia y nuevos respiradores llegaron al hospital Clemente Álvarez de los doce que Nación envió a la provincia de Santa Fe, según confirmó el secretario de Salud, Leonardo Caruana.
Unos cinco nuevos respiradores arribaron este domingo a Rosario de los doce que Nación envió a la provincia de Santa Fe, completando así un total de 430 instalados hasta el momento en la ciudad, según confirmó el secretario de Salud de la Municipalidad, Leonardo Caruana.
En el marco de la pandemia del coronavirus, que tiene hasta el momento unos 203 contagiados en todo el territorio provincial y dos muertes (una en Rosario y otra en Rafaela), según los datos confirmados anoche por la directora de Epidemiología, Carolina Cudos, la ciudad continúa preparándose a la espera de un posible pico.
En ese sentido, Caruana describió en una entrevista con Radio 2 que cuando hicieron el último relevamiento, de los 430 respiradores que hay en la ciudad, unos 300 corresponden al sector privado, casi 100 al sector público y otros 30 al Pami. En los próximos días, se espera que lleguen aun más.
Asímismo, también se indicó que se incrementará entre un 75 y un 100% la cantidad de camas críticas de terapia intensiva en el hospital Clemente Álvarez (Heca), donde fueron colocados los últimos cinco respiradores que llegaron.
En la entrevista, el titular de Salud rosarino aseguró que “de cada cien pacientes, el 80 por ciento van a presentar cuadros leves y van a requerir asistencia ambulatoria porque el virus se va a autolimitar” y “el 5 por ciento va a requerir internación en terapia intensiva y uso de respirador”.
Respecto del uso obligatorio de barbijos, que otras provincias están comenzando a poner en práctica o a planteárselo, Caruana aseguró que la ciudad se encuentra “analizando estas decisiones y recomendaciones, que han ido cambiando”, y que la OMS planteó que “el uso de mascarillas caseras se recomienda en esa fase, cuando salimos a un lugar en el que no podemos sostener el aislamiento”.
No obstante, aclaró que también “después surgen otros problemas, como tocarse todo el tiempo el barbijo o la mascarilla de acrílico” y fue contundente al afirmar que “el uso de barbijo o mascarillas no tiene que competir con el lavado de manos”.