Por Guido Brunet

“El teatro en sí es una obra de arte en su totalidad”, dice Guido Martínez Carbonell sobre la sala más emblemática de la ciudad. Y no escatima elogios para hablar de su querido El Círculo: “Está entre los principales del mundo”, afirma.

Es que por la icónica sala La Ópera pasaron muchos de los más reconocidos artistas a nivel mundial, desde clásicos a populares.

Guido Martínez Carbonell actualmente preside la Fundación El Círculo, que administra el teatro, que hoy por hoy, se sostiene a partir de privados y aportes estatales. “Recibimos subsidios de la Municipalidad como otras instituciones, pero muy poco, noventa por ciento es autogestión”.

Desde 1948 la histórica Fundación El Círculo adquirió el inmueble con el fin de evitar su demolición por problemas monetarios. Fue así como la histórica Fundación de la ciudad, nacida en 1912, compró el teatro para administrarlo y devolverle la gloria perdida.

“Nuestro objetivo como entidad es la parte cultural. Traemos orquestas y ballets de todas partes del mundo, producimos ópera y lo ofrecemos al público. Todo esto desde el vamos es deficitario, entonces tenemos que conseguir los recursos como para afrontarlo y poder ofrecerlo”, explica el actual presidente de la organización.

Dentro del teatro funciona una Escuela de Ballet Clásico Ruso y un Estudio de Comedias Musicales, donde asisten unos 500 estudiantes entre ambos. También allí ensaya la Orquesta Sinfónica Provincial, que cuenta con unos cien músicos en sus filas.

En total, por sus salas y pasillos pasan alrededor de unas mil personas al día, entre estudiantes, docentes, artistas, trabajadores y colaboradores. Y aunque parezca increíble el staff permanente de El Círculo es de unas veinte personas, a los que se suman un gran número de voluntarios. En total, unas cien personas se desempeñan en el lugar.

Financiación y puesta en valor

Martínez Carbonell destaca que en los próximos meses se pintara y se iluminará el frente del teatro, gracias a un convenio realizado con la Municipalidad de Rosario.

“El teatro está puesto en valor constantemente cien por cien, lo ves y no necesita nada”, se enorgullece Martínez Carbonell. Este verano se refaccionaron los camarines, moviliarios, plateas, pisos y se pintó en diferentes áreas. Y en 2016 se remodelaron los sanitarios.

Con respecto al financiamiento de las obras y la actividad general del teatro, el presidente de la Fundación comenta que “la Municipalidad nos da subsidios, pero es un cinco, un diez por ciento de lo que necesitamos para mantenernos y seguir, lo demás tenemos que conseguirlo”.

«La Municipalidad nos da subsidios, pero es un cinco, diez por ciento de lo que necesitamos para mantenernos»

Para ello, «se alquilan las salas, hay sponsors, está el estudio de comedias musicales que paga un canon, alquilamos el Café la Opera, tenemos producciones donde recaudamos dinero, es todo autogestión».

“El teatro lo que tiene de raro es que es privado porque otros teatros de la ciudad pertenecen a la Municipalidad o a la Provincia”, destaca Martínez Carbonell.

Entre los principales del mundo

El Círculo forma parte del selecto grupo de teatros de ópera antiguos del país, junto con el Colón y el Libertador San Martín de Córdoba. Incluso el de Rosario fue construido antes que el de Buenos Aires. Ya que El Círculo finalizó su construcción en 1904, mientras que el Colón data de 1908. Aunque el más antiguo de los tres es el de la capital cordobesa, que se inauguró en 1891.

“Hay teatros muy bellos en el país también, pero que son modernos. De esta magnitud no hay otros”, señala Martínez Carbonell.

El Círculo no sólo es uno de los teatros más reconocidos del país, sino que también, según su director, se lo puede comparar con cualquiera a nivel internacional. “Está entre los principales del mundo”, se jacta su administrador.

 

“El teatro bien podría estar construido en cualquier parte de Europa porque todo fue traído de allá, como se hacía en esa época”, destaca Martínez Carbonell. El presidente de la Fundación enumera algunas de las virtudes a nivel infraestructura de la sala: “Cuando vos entrás, más allá del espectáculo que vas a disfrutar, tenés pintura, herrería, ebanistería, butacas que son históricas, mármol de carrara, luminarias de Alemania y Francia”.

“Una persona que entra al teatro se queda fascinada. No solamente el público, también hay artistas que actúan en los principales teatros del mundo que se quedan maravillados con la belleza de El Círculo”.

«Los artistas, que actúan en los principales teatros del mundo, se quedan maravillados con la belleza de El Círculo»

Tal fue el caso del tenor italiano EnricoCaruso, quien en 1915, luego de su actuación envió una carta al director del teatro por aquel entonces: “Las condiciones acústicas de este teatro son tan completas, que nada tiene que envidiarle a los importantes coliseos del mundo que he visitado durante mi carrera artística, y en tal sentido es parecido al Metropolitan de New York. Atte, Enrico Caruso”, escribió el reconocido cantante de ópera.

Funciones

Para 2016 hay programadas 16  funciones con orquestas de Argentina, Italia, República Checa, Estados Unidos, Croacia. Además, el teatro produce sus propias óperas, como Pagliacci y Bohemme.

“A ningún empresario artístico se le ocurriría traer a la orquesta sinfónica de Londres por ejemplo, porque da pérdida. Nosotros sí lo hacemos porque nuestro objetivo es cultural. Es la única institución en Rosario que hace esto”, insiste Guido Martínez Carbonell.

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