Por Elisa Soldano
La comisión de Legislación del Trabajo de la Cámara de Diputados está tratando siete proyectos de ley que buscan reducir la jornada laboral, que actualmente es de 8 horas diarias y 48 semanales. Sin embargo, las diferentes iniciativas presentan algunas diferencias entre sí: algunas proponen una semana laboral de 40 horas, otras de 36 y, las más osadas, de 30.
Si bien se debe esperar a un dictamen de comisión para tener un proyecto unificado, donde los diputados deberán consensuar qué aspectos de todas las iniciativas van a formar parte del documento final, a continuación se exponen los puntos centrales de cada una de las siete iniciativas.
Cinco de ellas fueron presentadas por los legisladores del Frente de Todos Hugo Yasky, Claudia Ormachea, Sergio Palazzo, Eduardo Valdés y Mónica Litza; mientras que las dos restantes pertenecen al Frente de Izquierda, de la mano de Nicolás del Caño, y al Partido Socialista, con un proyecto impulsado por el santafesino Enrique Estévez.
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Un punto en común de todos los proyectos es que la reducción de la jornada laboral no podrá implicar un recorte en los salarios de los trabajadores. Además, las iniciativas no comprenden a “las personas que trabajen en establecimientos donde se ocupen solamente miembros de la familia del jefe, dueño, empresario, gerente, director o habilitado principal”.
El proyecto de Valdés, además, indica que “el total de horas liberadas deberá distribuirse entre nuevas trabajadoras y nuevos trabajadores”.
Jornadas de 40, 36 y 30 horas semanales
Una de las principales diferencias entre las siete iniciativas es la carga horaria que tendría cada semana laboral. El más extenso en este sentido fue el proyecto de Yasky, que apunta a una jornada de 40 horas semanales y 8 horas diarias.
Los proyectos de Ormachea, Palazzo, Litza y Estévez proponen una jornada laboral de 36 horas semanales, aunque con diferencias: los primeros tres establecen un tope diario de 6 horas –lo que implicaría seis días de trabajo– mientras que el diputado santafesino propone un máximo diario de 8 horas labores, siempre y cuando el total semanal no supere las 36 horas.
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Los proyectos más osados son los del Valdés y del Caño, quienes proponen una semana laboral de 30 horas, con máximos diarios de 6 horas. Así –y a diferencia de las otras iniciativas– los trabajadores sólo prestarían servicios cinco días a la semana.
¿Qué pasa con el horario nocturno?
El horario nocturno es el comprendido entre las 21 y las 6. Las diferentes propuestas también buscan modificar las condiciones de los trabajadores que prestan servicios durante este momento del día.
En los proyectos de Ormachea, Palazzo y Valdés se indica que la jornada de trabajo íntegramente nocturna no podrá exceder de cinco horas y quince minutos. La de Litza, en cambio, establece un tope diario de seis horas.
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Pese a esta diferencia, las cuatro propuestas apuntan a que cuando se alternen horas diurnas con nocturnas se reducirá proporcionalmente la jornada en doce minutos por cada hora nocturna trabajada o se pagarán los doce minutos de exceso como tiempo suplementario
Además, la iniciativa de Ormachea establece que “entre el cese de una jornada y el comienzo de la siguiente debe mediar una pausa no inferior a doce horas”.
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Del Caño, por su parte, propone que la jornada nocturna sea de cinco horas y, con respecto a la variación de horarios, considera: “Cuando se alternen horas diurnas con nocturnas se reducirá proporcionalmente la jornada en ocho minutos por cada hora nocturna trabajada o se pagarán los ocho minutos de exceso como tiempo suplementario”.
¿Cuáles serían los topes máximos diarios?
Actualmente la jornada laboral es de 8 horas diarias y de 48 semanales, pero hay muchos trabajadores que prestan servicios durante más horas por día para tener así un franco y medio o hasta dos francos por semana.
En este sentido, varias iniciativas que actualmente son tratadas por la comisión permiten flexibilizar el máximo de horas diarias permitidas en ambientes laborales en donde no corra riesgo la salud de los empleados, pero siempre y cuando se respeten los límites horarios semanales.
En este sentido, el proyecto de la diputada Ormachea –que proponía una semana laboral de 36 horas semanales– indica que la carga horaria por día puede extenderse a 7 horas, siempre que las tareas se desarrollen entre lunes y viernes.
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El legislador santafesino Estévez pone un límite máximo de 8 horas diarias, siempre y cuando la carga horaria semanal no exceda las 36 horas.
El diputado y referente bancario Sergio Palazzo apunta que la jornada salubre diurna podría tener un máximo de ocho horas diarias, siempre y cuando la semana “no exceda de cuatro días de trabajo”.
El proyecto de Valdés sostiene que “la jornada máxima diaria salubre podrá ser ampliada a siete horas y treinta minutos siempre que las tareas se desarrollen exclusivamente en cuatro días entre lunes y viernes”.
¿Los jóvenes de entre 16 y 18 años podrán trabajar?
Los jóvenes de entre 16 y 18 años están habilitados a trabajar, pero algunas iniciativas buscan que lo hagan con cargas menores que las personas mayores de edad. En este aspecto los proyectos también presentan diferencias, principalmente en lo que concierne al horario nocturno, entendido entre las 20 y las 6.
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Los proyectos de los diputados Yasky, Ormachea, Valdés y Litza proponen que los menores de entre 16 y 18 años no podrán trabajar en horarios nocturnos, pero, en el caso de estar empleados de fábricas que funcionan durante las 24 horas con tres turnos diarios, la imposibilidad de trabajar se acorta al rango horario comprendido entre las 22 y las 6.
La iniciativa de Ormachea, en tanto, establece que los jóvenes de entre 16 y 18 años deberán tener una jornada laboral de cuatro horas y media diarias o veintisiete semanales. En cambio, Litza propone que la carga horaria para los menores no supere las seis horas diarias o las treinta y seis semanales, al tiempo que indica que “la distribución desigual de las horas laborables no podrá superar las siete horas diarias”.
Los siete proyectos de reducción de la jornada laboral completos
Proyecto del diputado del Frente de Todos por la provincia de Buenos Aires, Hugo Yasky
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Proyecto de la diputada del Frente de Todos por la provincia de Buenos Aires, Claudia Ormachea
Proyecto de la diputada del Frente de Todos por la provincia de Buenos Aires, Claudia Ormachea by Conclusión TV on Scribd
Proyecto de la diputada del Frente de Todos por la provincia de Buenos Aires, Mónica Litza
Proyecto de la diputada del Frente de Todos por la provincia de Buenos Aires, Mónica Litza by Conclusión TV on Scribd
Proyecto del diputado del Frente de Todos por la Ciudad de Buenos Aires, Eduardo Valdés
Proyecto del diputado del Frente de Todos por la Ciudad de Buenos Aires, Eduardo Valdés by Conclusión TV on Scribd
Proyecto del diputado del Frente de Todos por la provincia de Buenos Aires, Sergio Palazzo
Proyecto del diputado del Frente de Todos por la provincia de Buenos Aires, Sergio Palazzo by Conclusión TV on Scribd
Proyecto del diputado del Partido Socialista por la provincia de Santa Fe, Enrique Estévez
Proyecto del diputado del Partido Socialista por la provincia de Santa Fe, Enrique Estévez by Conclusión TV on Scribd
Proyecto del diputado del Frente de Izquierda por la provincia de Buenos Aires, Nicolás del Caño
Proyecto del diputado del Frente de Izquierda por la provincia de Buenos Aires, Nicolás del Caño by Conclusión TV on Scribd
