«No nos tiembla la mano en el momento de hacer cambios. Siempre buscamos mejorar, buscamos las mejores respuestas y avanzar. Cada uno ha puesto lo mejor de si no lo ponemos en duda, pero tiene que comenzar otra etapa». Con estas palabras, el gobernador de Santa Fe, Omar Perotti dio por terminado el período de Jorge Lagna y dio la bienvenida a Rubén Rimoldi.
En un acto breve y sin estridencias, poco antes de las 10 de la mañana Rimoldi, que se desempeñaba como asesor del ministro de Gestión Pública, Marcos Corach, juró ante Perotti y asumió formalmente como ministro de Seguridad de la provincia.
«Comenzamos una nueva etapa, que nos requiere trabajando juntos, generando muchos acuerdos para construir la solución que necesitamos ante un problema de tanta gravedad», expresó el gobernador en una breve conferencia de prensa en la que eligió relevar de las respuestas al flamante titular de la Seguridad santafesina argumentando que «las respuestas que se le están pidiendo las tienen que empezar a ver a partir del hoy». «Le he pedido al ministro pocas palabras y muchos hechos», remarcó.
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Antes de estas palabras, Rimoldi solo dijo no tener antecedentes políticos y subrayó que fue convocado para el cargo por su «profesionalidad» y afirmó que «las políticas de seguridad continuarán tal como se venían haciendo. «En la Policía vamos a ordenar los mandos de la manera que corresponde y vamos a reestructurar los cuadros para que, en los lugares más álgidos, estemos presentes cuando sea necesario”. Además, aseguró que «a partir de ahora en reacomodar los cuadros para volver a poner a la Policía en la calle«.
Por su parte, el gobernador también apuntó que el problema de la seguridad «no es un problema de Santa Fe, es un problema de toda la Argentina» y manifestó que para resolverlo se necesita el acompañamiento legislativo para generar las leyes necesarias para resolverlo.
«La situación requiere de aportes, creo que amerita grandeza de todos los sectores. Necesitamos a cada uno de los integrantes de la policía; a los representantes de las fuerzas políticas; a los funcionarios de las justicias provincial y federal, y necesitamos el apoyo pleno del gobierno nacional», expuso Perotti a la vez que repitió algo que viene diciendo desde los comienzos de su gestión: «las directivas son claras e inamovibles, la lucha contra el delito y los funcionarios de la fuerza van a tener todo el respaldo mientras se mantegan dentro de la ley y con vocación de servicio». «Quienes no lo hagan quedará fuera de la fuerza. Eso se mantiene así».
