El Gobierno dispuso un incremento de casi 30% para senadores, diputados y autoridades del Congreso, en una medida ejecutada antes de la discusión del DNU 70/23 y de la reapertura del debate en torno a la Ley Bases.
Dicha decisión de elevar los salarios de aquellos que el propio Ejecutivo insistió en denominar «casta» se toma en contraste con la reiterada consigna de que «no hay plata» -argumento que incluso es utilizado para justificar los magros bonos otorgados a los jubilados-.
La medida -que implementa una suba formal de 28% en los salarios del personal del Congreso- lleva las firmas de la vicepresidenta Victoria Villarruel y del titular de la Cámara de Diputados, Martín Menem, ambos dirigentes de primera línea de La Libertad Avanza.
Resolución del Congreso – Aumentos salariales by Conclusión TV on Scribd
La resolución tiene un único artículo y dispone: «Reajustar el valor de cada unidad de módulo en un 16% a partir del 1° de enero del 2024 y un 12% más acumulativo, a partir del 1° de febrero del mismo año».
El texto omite aclarar que esto representa un aumento de la dieta de los 329 legisladores que pueblan entre ambas cámaras del Congreso, tal puede verse en los recibos publicados por el portal Cenital. En estos documentos, puede verse un alza que en términos porcentuales llega al 29,92%.
Recibo publicado por Noelia Barral Grigera en el portal Cenital.
Recibo publicado por Noelia Barral Grigera en el portal Cenital.
La medida está lejos de responder a los postulados del presidente Javier Milei y su ministro de Economía Luis Caputo, que suelen afirmar que todos los argentinos se empobrecen con la estanflación generada por sus políticas tendientes a -dicen- conseguir el equilibrio fiscal.
El ajuste, de esta manera, vuelve a impactar de lleno sobre aquellos que tienen menor capacidad de soportar la escalada de precios, como los jubilados, mientras Villarruel y Menem decidieron que los legisladores cobren un millón y medio de pesos en enero pasado y casi dos millones a partir de febrero.
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