Durante el mediodía de este martes, el Presidente Javier Milei encabezó la primera reunión de su gestión con los 23 gobernadores y el jefe de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. El conclave giró en torno a las medidas adoptadas por la nueva administración y los proyectos de reforma económica que el Poder Ejecutivo enviará al Parlamento, para los cuales el Jefe de Estado pidió el apoyo de los mandatarios provinciales.

El jefe de Estado estuvo presente durante toda la actividad y expuso durante 40 minutos; luego escuchó a los 24 mandatarios provinciales y respondió a cada una de las inquietudes planteadas, indicaron fuentes gubernamentales desde la Casa Rosada.

Fuentes oficiales de alto nivel informaron que la reposición del Impuesto a las Ganancias fue tratado en el encuentro y que se trabajó en la posibilidad de que se lo reimplante por el plazo de un año. Sin embargo, desde la Nación se aclaró que, si bien se entiende que esa es una posible forma de salvar la emergencia de las provincias por la caída de la coparticipación, no es un impuesto con el que se esté totalmente de acuerdo.

Cerca de las 14.40, el ministro del Interior, Guillermo Francos, brindó una declaración de prensa donde describió a la mesa de trabajo como «una reunión de espíritu colaborativo y de comprensión mutua», mientras los gobernadores destacaron la necesidad de «diálogo» y llamaron a «trabajar juntos» más allá de «las banderas políticas».

El funcionario del Gobierno nacional estuvo acompañado por los gobernadores de Salta, Gustavo Sáenz; de Córdoba, Martín Llaryora, y de Catamarca, Raúl Jalil. En conferencia de prensa, el ministro del Interior indicó que «se acordó conversar sobre el tratamiento de la ley que se va a enviar a extraordinarias esta semana y se les pidió el apoyo a los gobernadores para el tratamiento de esta norma para las transformaciones en la economía que pretende llevar adelante el Presidente».

Martín Llaryora señaló tras la reunión con Milei el «momento difícil» que atraviesa el país y dijo que es «una situación en la que nunca se tendría que haber caído». Sin embargo, el gobernador de Córdoba señaló que “todos los gobernadores más allá de los partidos políticos y las diferencias ideológicas le manifestamos al Presidente que queríamos trabajar en conjunto. Lo importante es dejar las diferencias de lado, ver qué nos une; la grieta tiene que ser parte de la historia”.

El gobernador de la provincia mediterránea dijo ademá que «la construcción conjunta de un país tiene que empezar a ser el camino común».

Por su parte, Gustavo Sáenz, gobernador de la provincia de Salta, aseguró que los mandatarios provinciales celebran «este tipo de reuniones», al considerar que la Argentina «necesita de políticos responsables, con madurez política y por sobre todas las cosas, que se venga una Argentina del encuentro, el diálogo, del consenso y de la armonía», porque la situación «no da para para más».

Por ello, los gobernadores van a «acompañar» lo que tengan «que acompañar», dijo, y destacó que «la única forma es trabajar juntos» con el Gobierno nacional de Javier Milei, a quien le expresaron su «predisposición de trabajar de manera conjunta».

Por su lado, Raúl Jalil afirmó que hay que «terminar con la cultura de la polémica y empezar con la cultura del dialogo» y destacó que fue una «muy buena reunión» la que mantuvieron con Milei.

«Todos tuvimos la coincidencia de tratar el tema del déficit fiscal. El mundo nos está mirando, no sólo la política sino también los inversores. Fue una muy buena reunión donde la mayoría de los gobernadores se ha podido expresar y el Presidente nos ha escuchado», dijo el gobernador catamarqueño.