El poder de compra de las jubilaciones no logró recomponerse en marzo: a pesar de que el gobierno de Javier Milei las aumentó un 27%, el haber se ubicó un 28% por debajo del mínimo histórico, registrado en la década de los 90’s.
El Mirador de la Actualidad del Trabajo y la Economía (Mate) advirtió que los bonos –que sólo reciben quienes cobran la jubilación mínima– no llegan a compensar la aceleración inflacionaria.
“Las jubilaciones atadas al régimen de movilidad jubilatoria cayeron a valores de miseria: su poder de compra es un 60% menor de 2015 y un 28% menor a los mínimos históricos de la década de 1990”, alertó el organismo.
Fuente: Mirador de la Actualidad del Trabajo y la Economía (Mate).
Cuando Javier Milei asumió a la presidencia, el pasado 10 de diciembre, la jubilación mínima era de $105.713 y, para reforzarla, se había anunciado un bono de $55.000 que elevó este haber a $160.713.
A pesar de que la inflación de diciembre fue del 25,5% –producto de la devaluación y de la desregulación económica que aplicó Milei en sus primeros días de gestión– y de que en enero y febrero los precios subieron un 20,6% y 13,2%, respectivamente, la jubilación mínima se mantuvo en $160.713 durante el primer bimestre del año.
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Según la Usina de Datos de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), en diciembre un rosarino necesitó $77.119 para comprar los alimentos básicos para su subsistencia y no caer en la indigencia, mientras que en enero fueron necesarios $91.314 y en febrero, $111.049.
De esta forma, en diciembre una jubilación mínima –con bono incluido– alcanzaba apenas para comprar los alimentos para dos personas, mientras que en enero este haber sólo cubrió 1,7 Canastas Básicas y, en febrero, 1,4. Esto demuestra cómo el haber fue perdiendo poder de compra al quedarse estancado mientras los precios se dispararon.
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A mediados de febrero, el Gobierno nacional actualizó los ingresos previsionales un 27,18%, de acuerdo a la fórmula jubilatoria que regía en ese momento. Así, el haber mínimo de marzo pasó de $105.713 a $134.446. En el tercer mes del año, además, se entregó un bono de $70.000, lo que elevó la jubilación a $204.446.
En marzo, un rosarino necesitó $113.525 para comprar sus alimentos básicos. Con el aumento de la jubilación mínima, este haber se recompuso con respecto a febrero y llegó a comprar 1,8 Canastas Alimentarias, pero aún está por debajo del nivel de diciembre.
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A partir de abril, las jubilaciones comenzarán a ajustarse de acuerdo a la inflación que informe el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), pero correrán con dos meses de atraso: es decir, en abril recién se actualizarán en base al aumento de precios que hubo en febrero.
La coordinadora de Usina de Datos UNR, Paula Durán, advirtió: “La jubilación ya perdió. Antes una jubilación mínima alcanzaba para casi tres canastas, pero hoy no llega a comprar el alimento de dos personas. Si los haberes acompañan la inflación, sólo vamos a sostener ese poder de compra. Es decir, vamos a lograr que no se siga deteriorando, pero no vamos a recuperar lo que se perdió”.
