Sobre el horizonte de la memoria de los argentinos subyace la idea de cómo nuestro país ingresó en la historia y se liberó de la dependencia del tan temido Fondo Monetario Internacional (FMI), organismo al cual Argentina le pagó la deuda en diciembre de 2005. La decisión política la tomó el entonces presidente Néstor Kirchner.

De acuerdo con un relevamiento realizado vía telefónica, por la consultora Tendencias -que se dedica a estudios y análisis electorales- se determinó que en una población de mas de 16 años en condiciones de votar en la provincia de Buenos Aires, el 60 por ciento de los encuestados, consideró que el acuerdo del Gobierno con el FMI, «perjudicaba al país».

 

 

 

 

 

 

 

 

La muestra fue tomada al día 28 de mayo y de un total de 3.467 casos efectivos. En otro orden, los encuestados fueron preguntados sobre qué se debería hacer con la deuda que el país tiene con acreedores externos, y el 41,7 por ciento respondió que «hay que esforzarse para pagar y cumplir los compromisos».

En tanto que solo un 34,3 por ciento expresó que hay que dejar de pagar la deuda, ya que es ilegal e ilegítima.

Sin opinión sobre el tema se manifestó el 23,8 por ciento.