El presidente de Industriales Pymes Argentinos (IPA), Daniel Rosato, cuestionó al gobierno de Javier Milei por la “apertura indiscriminada” de importaciones, por entender que esa decisión es “injusta y desleal” y provocará el cierre de “miles” de pequeñas y medianas empresas.

“Las medidas que lleva adelante el Gobierno plantean una competencia desleal para las pymes, son muy injustas. Tenemos hoy algunas empresas que trabajan al 25% de su capacidad instalada, por eso entendemos que tiene que haber una alternativa para darle más igualdad a la competitividad”, sostuvo el empresario.

Los integrantes de IPA presentaron este lunes un informe titulado “Las pymes industriales en los primeros 100 días de Milei”, a través del cual trazaron un panorama del sector.

Ante la aceleración inflacionaria registrada en el mes de marzo, el Gobierno habilitó la importación de alimentos, bebidas y productos de limpieza, para que compitan con la industria nacional. El informe del IPA advirtió que esta medida afectará de forma directa al 15% o 20% de las pymes que funcionan en el país.

Según el organismo, del total de bienes que Argentina compró en el exterior en 2022, los alimentos representaron el 2,9%, mientras que en 2023 esta cifra tuvo una leve caída al 27%. La importación de comida representó para el país una inversión de casi 2.000 millones de dólares por año.

“Los perjudicados no son los grandes monopolios, sino unas 14.000 empresas, en su mayoría pymes, productoras de alimentos manufacturadas”, afirmaron. Asimismo, señalaron que las grandes empresas podrán importar el bien final, mientras que las pymes productoras de alimentos deberán acceder al insumo.

Según Rosato, “Argentina tiene que salir adelante con la producción y no con el fomento a las importaciones, porque el esfuerzo que pide el Gobierno está recayendo sobre las pymes y sobre los trabajadores, y pedimos que eso se modifique”.

A su criterio, los trabajadores “no tienen recomposición salarial, el mercado interno se achica y las pymes y la industria comienzan a bajar los precios porque cae la demanda. Eso implica que se produce menos. Así, las empresas empiezan a ajustar por todos lados y dejan de lado las inversiones”.

Rosato reclamó tanto al presidente Javier Milei como al ministro de Economía, Luis Caputo, que reciban a las pymes “así como recibieron la semana pasada a las grandes empresas del Grupo de los Seis”.

Por su parte, el economista Martín Kalos también advirtió por las “reglas de juego desiguales” para las pymes industriales argentinas, al tener que competir con productos importados.

“Abren las importaciones a los productos terminados y no las abren para que las empresas locales compren insumos. Es decir, no dejan que las pymes argentinas produzcan para competir en el mercado local”, enfatizó.

Kalos comentó que en 2023 “había récord en la cantidad de pymes en el país, con buenos indicadores. Pero eso es lo que ahora está comenzando a deteriorarse y ya se está viendo en las vacaciones adelantadas, en recorte de horas extras, en suspensiones, entre otras decisiones empresarias”.