Cinco jóvenes que estaban detenidos en la comisaría 10ª de la ciudad de Santa Fe escaparon tras romper los barrotes que daban a los fondos de la dependencia y tres de ellos continuan prófugos tras la recaptura de los primeros dos.

Las autoridades policiales añadieron que Jonatan Baldes, Ángel Sequeira y Cristian Carpenzano eran intensamente buscados en distintos barrios de la capital provincial tras huir de la seccional situada en Estanislao Zeballos al 4.200, en el noroeste de la ciudad.

De acuerdo al relato de los voceros, esos tres hombres más los dos que luego fueron apresados rompieron barrotes que daban al fondo de la comisaría y pasaron a una casa vecina, desde la que salieron a la calle.

La fuga, ocurrida en la tarde de este martes, fue descubierta por uno de los agentes del tercio de guardia de la seccional, que notó que algo había sucedido en el sector de calabozos cuando observó el sitio por donde escaparon los reclusos.

Personal de patrullas del Comando Radioeléctrico fue convocado a la comisaría y se unió al esquema de localización ordenado por la Unidad Regional 1, que permitió localizar al primero de los prófugos a poca distancia y al segundo en horas de la noche, cuando caminaba por la calle junto a una mujer y una niña.

Horacio Alejandro López fue atrapado en Gaboto al 6.300, donde fue divisado por agentes mientras corría a toda velocidad y por esa razón fue abordado.

En tanto, Sebastián Benítez fue identificado por agentes de la Comisaría 6ta. mientras caminaba por inmediaciones de avenida Facundo Zuviría y calle Gorostiaga también en compañía de una mujer y una niña.