Por Carlos Andrés Ortiz

 

En plena campaña eleccionaria, el actual presidente, con su habitual verborragia cargada de énfasis hueco de fundamentos, tuvo conceptos nada diplomáticos y además incoherentes, al expresar que pretendía cortar todo vínculo -incluso comercial- con los dos principales socios nuestros en el comercio exterior, como lo son Brasil y China.

Y eso lo quería hacer, por ideología. Más bien mostrando su senda de subordinación total sobre actuada, a los dictados de EEUU y sus socios menores.

Agravando groseros errores dichos con énfasis propio de desquiciados, expresó que las operaciones comerciales con ambos países, podrán ser hechas mediante “acuerdos entre privados” … lo cual demuestra el tremendo grado de improvisación e ignorancia de la realidad, que exhibe el actual anarquista puesto a presidente de Argentina.

Ningún Estado Nacional, deja el estratégico comercio internacional, en manos de “los privados”, pues el respectivo Estado interviene fuertemente … excepto en los casos de colonias o países pseudo independientes, transformados en colonias de grandes potencias imperiales; esto último el claro objetivo del accionar de libertarios y neoliberales, como paso previo al desguace de Argentina.

El hecho de pretender descalificar a Brasil y China, tildándolos como “comunistas”, y en tal delirante enfoque de cerrado ideologismo erróneo y hoy anacrónico, pues estuvo vigente en el período de la Guerra Fría, no solo distorsiona las evidentes realidades, y pretende condicionar todo al cerrado enfoque ideológico de los libertarios y neoliberales, omitiendo que si fuera por la ideología, China y EEUU no mantendrían los elevados niveles del intercambio comercial, aun pese a fuertes disputas por áreas tecnológicas muy sensibles, en las que EEUU no se resigna a los mayores avances logrados y en ampliación por parte de China.

BRICS

Semejantes disparates, son repetidos por mercenarios de la comunicación, y por algunos odiadores seriales desinformados crónicos, que apoyan los desquicios del “libertarismo”, incluyendo en esos grupos al grueso de los uniformados, tan poco conocedores de Historia, Economía y Geopolítica, como lo volvieron a demostrar apoyando a un anarquista, odiador del Estado, que pretende el desguace del mismo, y con ello buscar la disolución nacional.

Para emparchar al como sea las agresiones verbales del entonces candidato presidencial, contra Brasil y China, debió operar de apuro y casi a los ponchazos, la financista puesta a cargo de las Relaciones Exteriores, gestiones con pobres resultados, y poco después empeorado todo, por el accionar de la misma hoy canciller.

Con la metodología de sobre actuación demostrando sumisión total a los dictados del “gran país del norte”, Diana Mondino tuvo un gesto de reconocimiento implícito a la postura de Taiwán, lo cual previsiblemente iba a generar un fuerte reclamo de China, tal como sucedió. Después de ese nuevo desatino, la improvisada canciller debió volver a limar asperezas, con el embajador chino, consecuencias del también improvisado accionar de los libertarios en Relaciones Exteriores, en lo que solo demuestran sobreactuada subordinación a los designios de EEUU y sus socios principales. Antes de eso, la dupla Milei – Mondino, cometió el serio desatino de renunciar a nuestra solicitada incorporación al BRICS, acción de nulos efectos positivos y múltiples consecuencias negativas.

Como para sobre actuar “obedientemente” a los dictados de EEUU Y del Bloque Atlantista, presurosa fue la improvisada canciller, a tramitar la incorporación de Argentina a la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico), lo cual no es esperable que nos traiga grandes beneficios y sí en cambio muchos serios problemas, entre ellos la imposición del “libre comercio”, lo cual de perpetrarse, será el acta de defunción de nuestra más que respetable estructura industrial y su asociado directo, el sector tecnológico, en el cual tenemos razonable desarrollo, con algunos puntos fuertes en los que somos referencias mundiales, por caso el Sector Nuclear y el Satelital, entre otros.

El BRICS incluye tres megas potencias mundiales, y está consolidando una sólida estructura financiera, por fuera de las presiones del hoy decadente dólar estadounidense. Con eso, sobre todo con las fuertes espaldas de China, ofrece financiación para grandes obras públicas y como auxilios financieros a bajas tasas y condiciones mucho más laxas, que las restrictivas e invasivas imposiciones del Bloque Atlantista, en sintonía con el cual opera la OCDE.

No es un tema menor considerar que mientras el grupo BRICS apoya la postura argentina en el sensible tema Malvinas (el cual tiene proyecciones antárticas), en cambio la OCDE de hecho respalda el accionar agresivamente colonialista del Reino Unido, lo que no puede sorprender, pues el RU y su estrecho aliado EEUU, son los principales miembros de la OCDE, junto a la Unión Europea y otros aliados estratégicos.

OCDE

En el espinoso tema del polvorín que es el conflictivo Medio Oriente, la subordinación de hecho a Israel, significa pisotear la larga tradición diplomática nacional, de equidistancia, de respeto a todos los países, y a la postura de no intervención, con la cual fuimos neutrales en las dos grandes guerras mundiales, sin desconocer la mera formalidad que las presiones nos llevaron a asumir al fin del segundo gran conflicto mundial.

En Argentina convivimos en paz, respeto y armonía, argentinos de distintos orígenes, entre ellos hebreos y arábigos, con mayorías de cultura básicamente cristiana, sin perjuicio que en todos ellos existan no creyentes o no practicantes de las tres grandes religiones monoteístas.

Las posturas cargadas de ideologismo exacerbado de dudosas fundamentaciones, que evidencian libertarios y neoliberales, solo fomentan potenciales divisiones y conflictividades internas, que se sumarían a la vieja “grieta” entre liberales de hecho apátridas, con sectores del Pensamiento Nacional.

Vinculado con el párrafo precedente, hoy los anarcos libertarios y sus “socios” neoliberales, pretenden exaltar el pensamiento de Alberdi, del cual ocultan cuidadosamente las profundas rectificaciones que hizo en sus años mayores, sobre todo después de haber mantenido largas charlas con El Restaurador Juan Manuel de Rosas, este último en el exilio forzoso al que lo condenaron los vengativos y apátridas liberales del mitrismo y sus sucesores.

Mgtr. Carlos Andrés Ortíz

Analista de Temas Económicos y Geopolíticos