Taxistas de Rosario y la región realizarán una movilización a las 11 este jueves en el puente Molino Blanco –ubicado en cercanías de Ayacucho y Circunvalación– para pedir más controles por parte de la Municipalidad para evitar la instalación de Uber y otras plataformas de transporte que, actualmente, son “ilegales”.

En diálogo con los medios, entre ellos Conclusión, el referente de la Cámara de Titulares de Licencias de Taxis de Rosario (Catiltar), Marcelo Díaz, dijo: “Esta situación reunió a todo el servicio público de la región, tanto taxis como remises, todos tenemos un mismo enemigo, una misma meta, que es erradicar completamente la ilegalidad de la región, fundamentalmente de las aplicaciones”.

“Este jueves nos vamos a concentrar en Ayacucho y Circunvalación para visibilizar la problemática”, indicó Díaz, quien además detalló que en el reclamo participan taxistas de Rosario, Villa Gobernador Gálvez, Pérez, Funes, Roldán y Granadero Baigorria.

“El enemigo es Uber, son las aplicaciones. Se están perdiendo son las fuentes de trabajo”, señaló el referente de los titulares de taxis.

Seguidamente, indicó que este jueves, a partir de las 11 de la mañana, se cortará “todo tipo de servicio, tanto de las remiserías, como de radiotaxi y MoviTaxi”.

A su turno, el también integrante de Catiltar, José Tornambe, puso como ejemplo lo que ocurrió en Mendoza hace unos años, donde el desembarco de Uber “fundió a los taxis”.

“Uber cobra lo que se le da la gana. Lo único que queremos es trabajar, hoy se suma el condimento de la situación económica, que hace que no se pueda mantener el vehículo y que no podamos sobrevivir”, apuntó.

Por último, pidió que la Municipalidad de Rosario realice sobre Uber “los mismos controles” que les hacen a los taxistas.

Por su parte, el referente de Paradas Libres, Ricardo Arico, expresó que “falta voluntad política” para erradicar a Uber de la ciudad y cuestionó duramente al intendente Pablo Javkin: “La palabra no sirve para nada, sirve la acción”.

“Del Concejo no podemos esperar demasiado porque esto está en manos del Ejecutivo, que es el que tiene que combatir el transporte ilegal. En este momento, Uber y cualquier otra aplicación son ilegales en Rosario, entonces estamos sometidos bajo una competencia ilegal, desleal y desigual”, sentenció Arico.

Y agregó que son “pocos” los taxistas que trabajan con Uber, aunque aseguró que hay “miles de coches particulares” que prestan servicio para esta aplicación.

Además, cuestionó la poca transparencia que la plataforma ofrece a los usuarios: “No sabemos quiénes son los conductores, no sabemos si salieron de la cárcel hace quince días y están transportando gente, mientras el organismo de control, que es el Ente de la Movilidad, supervisado por el intendente Javkin, mira para un costado”.