La Municipalidad confirmó este miércoles que la línea Q dejó de funcionar a partir de esta semana en el marco del plan de «adecuación» del sistema de transporte para la temporada de verano. Según expresaron las autoridades, la quita de esa servicio está justificada por la poca cantidad de pasajeros que lo utilizaban hasta ahora.

«Es importante decirles que la línea Q dejó de funcionar a partir de 26 de diciembre. Esto tiene que ver con la adecuación del sistema que nosotros trabajamos habitualmente (en esta época del año) por la baja de actividades asociada al receso en el ciclo lectivo. Esto también está relacionado a cómo se modifica la ciudad en este momento, porque obviamente hay personas que toman vacaciones», expuso la secretaria de Movilidad de Rosario, Nerina Manganelli, en dialogo con Canal Tres.

Dicha información no tuvo ningún aviso previo y se confirmó en el contacto que la funcionaria tuvo con un único medio televisivo. El Municipio tampoco había anunciado con anterioridad el inicio del esquema de -como lo llama- «adecuación» del transporte para esta altura del calendario.

«Todo responde al monitoreo que hacemos habitualmente en la ciudad. En función de eso se adecuan los cuadros horarios. Por esta razón dejó de funcionar la línea Q. Además, en el Cuándo llega; el Google Maps y la página del Ente de la Movilidad, donde las personas habitualmente consultan dónde se lo pueden tomar, la línea Q no figura», apuntó Manganelli.

Ante la repregunta respecto a por qué no avisaron con antelación para favorecer una mejor organización de los usuarios, la titular de la Secretaría de Movilidad argumentó que era un servicio poco utilizado por los pasajeros de Rosario.

«Algo importante para decir es que, en diciembre la línea Q transportó 1.600 pasajeros. Es un promedio de 50 por día, es muy bajo. De hecho, traducido a cuestiones de participación porcentual que tiene la línea en cantidad de pasajeros que transporte en el sistema es un 0,02%. Lo digo como justificación, porque así es como adecuamos el sistema», planteó.

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Cabe recordar que los coches de esta línea tuvieron que quedar fuera de servicio el verano pasado porque sus baterías no están preparadas para circular en las temperaturas de la ciudad.

«Evidentemente están fabricados para funcionar en temperaturas como las que hacen en países como Rusia y claramente no están acondicionados para poder hacerlo en el verano rosarino», explicaron entonces desde la Municipalidad.

El pasado 19 de diciembre, por la madrugada, la mayoría de los concejales votó a favor de concederle al intendente Pablo Javkin la autorización de aumentar bimestralmente el boleto del Transporte Urbano de Pasajeros, así que en enero próximo volverá a incrementar la tarifa.