Este lunes en el marco de un emotivo acto se realizó la señalización del sitio de Memoria Nº 15 de Santa Fe, el ex Centro Clandestino de detención que funcionaba en la ex fábrica de armas Domingo Matheu (Av. Francia 5200) durante la última dictadura Cívico militar de 1976 a 1983.
A través de un proyecto de la Dirección Nacional de Sitios de Memoria se preservan y señalizan espacios que eran utilizados como circuitos represivos para visibilizar el compromiso del Estado democrático de dar a conocer y castigar dichos crímenes. Según consta en el archivo Nacional de la Memoria de los registros de Derechos Humanos de Santa Fe, en la ex fábrica militar se realizaban secuestros y todo tipo de torturas a hombres y mujeres. Este nuevo sitio de la Memoria, se suma a otros Centros Clandestinos de Detención dispuestos como espacios públicos, como La Calamita, la quinta de Funes, la Escuela Osvaldo Mgnasco, el Batallón de Comunicaciones 121, entre otros. 
El Dr. Marcelo Trucco, secretario de Derechos Humanos de Santa Fe, en diálogo con Conclusión expresó unas palabras con respecto a lo que significa la conmemoración de un acto semejante, «es renovar el compromiso por la Memoria, por la Verdad, por la Justicia, y es el deber del Estado provincial decir presente. Es demostrar a la sociedad cuales son estas condiciones que no hay que olvidar, así como también sirve para revalorizar la democracia» dijo, a la vez que reconoció la labor de la Justicia en sancionar los crímenes aberrantes que se produjeron durante la época represiva. «Está la satisfacción que la mayoría de los hechos terribles que ocurrieron acá fueron juzgados y sus responsables condenados, eso es un mensaje positivo para la comunidad. Con sus tiempos, la Justicia en algún momento llega», destacó. En la causa judicial por ex Fábrica Militar (conocida como Guerrieri 1) que tuvo su proceso en los Tribunales Federales de Rosario los imputados fueron condenados a prisión perpetua por los delitos cometidos.
Uno de los testimonios que más conmoción causó entre el público presente, fue el de María Eugenia, hija de Olga Moyano, ex detenida y sobreviviente de el ex Centro Clandestino en cuestión.»Esta señalización no solo sirve para recordarlos y homenajear a los desaparecidos, sino también para visibilizar esta parte de la historia, y no repetirla nunca más», expresó entre lágrimas. Y añadió: «También me siento hija de los 30.000 compañeros detenidos, porque como decimos con los compañeros de HIJOS, todos somos hijos de una misma historia. Ante el panorama de olvido y reconciliación que nos plantean algunos nosotros respondemos que no olvidamos, no nos reconciliamos, y no bajamos los brazos».
Asimismo, Ramón Verón, subsecretario de Derechos Humanos de zona sur, y víctima del ex CCD de Fábrica Militar, en esa misma línea destacó que la señalización es para que la Memoria siga presente. «Hoy en esta función pública que tengo en la provincia tengo la obligación de encontrar los cuerpos de los desaparecidos que aún quedan por aparecer», subrayó, a la vez que expresó su deseo de que actividades como estas, sean el comienzo de otras en relación a la Memoria «que la debemos tener presente».
Antes de dar por finalizada la ceremonia, se llevó adelante el acto de descubrir la placa, y se invitó al público a participar. El director Nacional de sitios de Memoria de la secretaria de Derechos Humanos de la Nación, Ariel Gomplewicz tomó la palabra y expresó que para antes de fin de año aún quedan previstas otras diez marcaciones que se engloban en las políticas de Estado de Memoria, Verdad y Justicia, como por ejemplo la Jefatura de la localidad de Reconquista. «Son muchas las que faltan pero es mucho también todo el camino que estamos haciendo», concluyó.
