Tras los recientes hechos de violencia que se suscitaron los últimos días y pusieron a los trabajadores de la salud bajo reiteradas amenazas, empleados del Servicio Integrado de Emergencias Sanitarias (Sies) reclaman medidas de seguridad y mayor protección para poder desarrollar su trabajo sin inconvenientes.

El último hecho registrado fue el ataque que sufrió uno de los médicos del Sies el pasado sábado a la noche cuando fue asaltado a punta de pistola cuando iba a realizar un servicio de atención domiciliaria. Eso generó preocupación de los equipos de trabajo, que se autoconvocaron en la madrugada del domingo en Suipacha y Pellegrini, donde está la base del área de movilidad del sistema de emergencias, y se resolvió restablecer el servicio durante todo el fin de semana siempre y cuando la ambulancia cuente con acompañamiento policial.

Para ver cómo continúa la situación, ahora están reunidas las distintas partes involucradas en el tema para ver si logran dar con una solución y resolver el conflicto. Es por eso que miembros de la Secretaría de Salud municipal, del Ministerio de Seguridad provincial, Amra y Sies se juntaron para debatir posibles alternativas.

Según las primeras informaciones, y como adelantó Jorge Martínez, del Sindicato de Trabajadores municipales, «por el momento se decidió continuar con el acompañamiento policial, es decir, que cada ambulancia del Sies siga siendo resguardada por un móvil de la policía».

En ese marco, el secretario de Salud del municipio, Leonardo Caruana, afirmó a LT3 que con la reunión con autoridades del Ministerio de Seguridad buscan “revisar los protocolos y los dispositivos como lo hicimos en casos similares con otras instituciones para garantizar este servicio esencial y a su vez la integridad de los equipos de trabajo”.

Por su parte, Sandra Maiorana, secretaria gremial de la Asociación de Médicos de la República Argentina (Amra), dijo que “el planteo que va a llevar el Amra es el mismo que van a llevar todos los trabajadores del Sies que se autoconvocaron el sábado a la noche. El mismo responde a que un móvil de seguridad los acompañe en forma permanente durante toda la guardia a cada móvil y que la gente que ocupe ese móvil sea de Gendarmería”, afirmó la secretaria gremial.

“Los trabajadores no se pueden comunicar entre ellos, no se hizo mantenimiento de la antena del sistema, se cayó la licitación y los empleados deben usar su propio celular. Hace unos 6 meses que esto sucede. Si al médico le pasa algo debe llamar por su celular y esperar ingresar a la central de llamadas. Esto sí tiene solución”, planteó y finalizó: “La gente del Sies quiere trabajar pero con seguridad”.

En tanto, Liliana Vidal, una de las profesionales que trabaja en el Sies y que estuvo en la guardia el día que se generó el reclamo en Suipacha y Pellegrini, expresó que “nosotros venimos viviendo muchos hechos de inseguridad desde hace bastante tiempo y lo vivimos con mucha angustia porque podría haber terminado mal».

«Nosotros -continuó la médica- nunca estuvimos de paro, sino que fuimos a hacerle el apoyo a nuestro compañero y mientras tanto la ciudad estuvo cubierta por servicios privados. El resto del fin de semana estuvimos saliendo acompañados por móviles policiales”, relató la profesional de la salud.

Además Liliana destacó que las demoras que se dan durante el servicio de emergencias no son porque ellos quieran demorar “sino que por un lado, las comunicaciones están funcionando mal, por el otro los móviles de emergencia somos siete para toda la ciudad. A veces tenemos la ayuda de dos móviles de la provincia, y además cuando tenemos que hacer traslados, son pocas las unidades, yo personalmente he estado 40 minutos esperando en un punto”.

En tanto, en diálogo con LT2, Gustavo, el chofer del Sies que el sábado pasado sufrió el violento asalto, admitió que los empleados del área trabajan con mucho miedo. «Nos pusieron el arma en la cabeza”, sostuvo aún conmovido por el robo. Según indicó, fue apuntado y logró escuchar el sonido del gatillo: “El título de las notas periodísticas pudo haber sido diferente”, advirtió y remarcó que “hace diez años que hago mi trabajo y me gusta pero todos tenemos mucho miedo, nos sentimos muy desprotegidos”.

El conductor confirmó que el sábado pasado, cerca de las 21, fueron a atender una emergencia en inmediaciones de Arijón y Avellaneda por un accidente de tránsito: “Fuimos llamados por la central, fuimos hacia el lugar con la unidad pediátrica y cuando nos íbamos acercando fuimos interceptados por personas. Frenamos porque pensamos que nos iban a decir dónde era el accidente”, señaló. Sin embargo, no fue así. Bajo amenaza de muerte les quitaron todos los elementos personales y equipos de comunicación. “Nosotros seguimos trabajando igual, asistimos a la criatura (herida en el accidente) y la llevamos al Vilela”, manifestó.

Foto: Florencia Vizzi (archivo)