Durante la mañana de este lunes se realizó en el Centro de Justicia Penal de Rosario la audiencia imputativa contra dos hombres acusados de haber protagonizado una picada el pasado domingo 20 de agosto en la zona de Mendoza y Brasil, en la que perdió la vida Mario Antonio Esquivel. La jueza que llevó adelante el proceso dictó la prisión preventiva por el plazo de ley para los dos imputados, al tiempo que coincidió con la teoría de Fiscalía, que apunta a que no se trató de un accidente de tránsito, sino que el choque fue producto de una prueba de destreza y velocidad.
A los acusados, identificados con las iniciales N.M. y D.B., se los imputó por el delito de homicidio simple con dolo eventual en concurso real, con el delito de prueba de velocidad y destreza sin la debida autorización legal. La jueza de primera instancia, Silvia Castelli, tuvo por formalizada la audiencia y dispuso la prisión preventiva para ambos por el plazo de ley.
Tras la imputación, las fiscales de la Agencia de Siniestralidad Vial, Mariana Prunotto y Valeria Piazza Iglesias, dieron una conferencia de prensa –en la que estuvo presente Conclusión– y brindaron detalles del hecho.
“La doctora Castelli acogió la calificación de la Fiscalía, homicidio simple con dolo eventual y prueba de velocidad y destreza en concurso real, y consecuentemente otorgó la prisión preventiva por el plazo de ley a ambos imputados. La imputación es provisoria, estamos en los primeros momentos de la investigación, mientras la Fiscalía deberá recoger más evidencia para acentuar la calificación o la posibilidad de una recalificación, es decir, la acreditación o no de la prueba de velocidad y destreza”, explicó la fiscal Piazza Iglesias.
A su turno, Prunotto indicó que para probar –aunque de forma provisoria– la hipótesis de la picada, fueron claves las imágenes y los videos aportados por las cámaras de seguridad públicas que hay en la zona –administradas tanto por el Gobierno de Santa Fe como por la Municipalidad de Rosario–, mientras adelantó que ahora esperan recibir más videos que permitan “reconstruir el hecho” y ver si es posible sostener la calificación o reformularla.
En cuanto a los cargos que pesan sobre los imputados, las fiscales aclararon que “quienes corren picadas saben que están poniendo el riesgo la seguridad del tránsito”, y manifestaron que a pesar que uno de los acusados mató y el otro no, la jueza consideró que ambos son coautores funcionales del delito de dolo eventual ya que “no se puede distinguir el aporte que cada uno hizo en el resultado final, que fue la muerte de la víctima que circulaba en al Suzuki Fun”.
Cabe destacar que, de los dos acusados, N.M. fue quien chocó contra el auto en el que circulaba Esquivel; mientras que D.B. se dio a la fuga y recién se presentó a declarar ante Fiscalía cuando los investigadores del caso habían accedido a los videos y pudieron divisar el auto en el que circulaba, de color azul.
Las fiscales además sostuvieron que los dos imputados se conocen entre sí, y que según pericias preliminares se comprobó que el auto en el que circulaba N.M. no iba a menos de 81 kilómetros por hora. Además, tanto Piazza Iglesias como Prunotto solicitaron a que si alguien vio el suceso, se acerque a la justicia para brindar su testimonio.
El episodio por el que se imputó a los dos acusados ocurrió el domingo 20 de agosto, cerca las tres de la mañana, cuando N.M. circulaba a bordo de su auto Peugeot 206 por calle Mendoza (con sentido este-oeste), realizando una prueba de velocidad y destreza junto con D.B, que circulaba en un vehículo color azul.
Cuando ambos llegaron a la intersección con calle Brasil, el auto en el que circulaba N.M. impactó contra el costado del vehículo Suzuki Fun en el que se desplazaba Esquivel junto a tres personas más, quienes circulaban por calle Brasil con sentido sur a norte.
