Combo explosivo: suben los impuestos y baja el consumo

Por Jennifer Hartkopf

Los llamados ‘tarifazos‘ hablan de una realidad que preocupa a gran parte de la sociedad argentina. Muchos son los que se quejan de los recientes aumentos de tarifas de Servicios, de la presión tributaria, de los costos fijos que se deben afrontar a diario, así como de la suba de los alquileres y los impuestos. La actividad comercial no es la excepción, sino uno de los sectores más afectados.

En ese contexto, Conclusión dialogó con distintos representantes de comercios, organizaciones defensoras del consumidor y sindicatos, que expresaron su preocupación por la situación actual que viven y revelaron sus inquietudes.

Desde el Paseo Arijón, Rubén Mendoza describió el panorama actual y dijo que «empezaron a surgir problemas no solamente con la baja de las ventas sino con el tema de los alquileres, el tema de las boletas de la EPE más otros impuestos que subieron y ya hay un 20 por ciento de negocios que empezaron a bajar las persianas, con carteles de liquidación por cierre definitivo».

Además advirtió que «si esto no cambia vamos a ir cerrando las persianas como en el año 2000″. «Esta situación repercute también en las personas que nos vienen a comprar a nosotros, el cliente de todos los días se da cuenta que la plata no le alcanza», afirmó.

Por último, Mendoza expresó que «las ventas no son las mismas, los sueldos no alcanzan y todavía no aumentó el colectivo. O se bajan todos los precios o se aumenta el sueldo a la gente para que puedan seguir comprando, esto no tiene ningún secreto«.

Por su parte, Fabio Acosta de la Asociación Casco Histórico, se mostró preocupado y dijo que «se vive una situación de crisis con bajas de consumo, aumento de impuestos e inflación que se traduce en un combo muy peligroso para poder seguir trabajando». «La gente no tiene dinero y esa situación se traslada en cierre de comercios, desempleo, y puede despertar algún problema social», agregó.

Consultado sobre posibles soluciones al respecto, responsabilizó al Estado Nacional porque «es el único que tiene la llave para volver a un estado de precrisis».

También la Cámara de Almaceneros comparte la situación que sufren los comercios rosarinos y coincide con sus representantes en que «la solución está en manos del gobierno provincial y nacional».

«El Estado debería volver al subsidio para los sectores del comercio y los residentes en función de que es la única forma que tenemos de afrontar los gastos de la facturación», apuntaron.

El panorama aún empeora cuando son los puestos de trabajo los que empiezan a verse comprometidos. Tal es así que desde la Cámara de Heladeros, Marcelo Romano, desesperanzado, lamentó que «lo más probable es que esto no se revierta y si eso pasa se ajustará, dolorosamente se achicará gente, y habrá gente sin laburo, no nos va a quedar otra salida».

En ese sentido se manifestó también Leonardo Santero, de Paseo Pellegrini, quien habló con Conclusión no sólo de aumentos de la EPE del 50 por ciento, alrededor del 600 y 1000 por ciento en el gas y entre un 50 y 100 por ciento de impuestos municipales sino que además advirtió que «si esto no cambia cada uno tendrá que armar estrategias  para salir adelante pero seguramente quedarán un par en el camino».

«En cinco años es la primera vez que tengo la problemática para pagar los sueldos, se produjo una baja entre un 20 o 30 por ciento en el consumo», destacó Santero.

Seguidamente detalló: «El problema es la baja del consumo. A partir de los ‘tarifazos’ que sufre la gente, baja el consumo. Si tuviéramos el consumo que veníamos teniendo  pero ‘tarifazos’ puntuales como por ejemplo a los gastronómicos, a los panaderos, no estaría la problemática de hoy. El consumo tira la economía, si no hay consumo hay que empezar a ajustar«, disparó.

En tanto desde la Cámara de Panaderos, Jorge Vitantonio plateó la necesidad de «involucrar a toda la sociedad, porque a todos nos metieron la mano en los bolsillos». Y añadió: «Hay que apostar a una rebelión fiscal».

No obstante, desde la Oficina de Defensa al Consumidor destacaron que tanto el gas, como la luz y el agua «son derechos humanos que deben defenderse, por eso es fundamental plantear el tema de los subsidios para fomentar el mercado interno, porque esta situación nos castiga a todos«. Y asimismo, consideró que la Empresa Provincial de la Energía (EPE) «debe ser transparente, debe ser regulada y recibir sanciones si no cumple con lo que le corresponde. El Estado tiene responsabilidad sobre eso».

Finalmente, el presidente de la vecinal del barrio Empalme Graneros, Osvaldo Ortolani dijo que «esta coyuntura que vivimos va a dejar seguramente en los próximos seis meses al 50 por ciento de los comerciantes afuera».

Así, las distintas organizaciones acordaron ayer en una reunión pedir una audiencia con el gobernador Miguel Lifschitz a los fines de arribar a una solución u alternativa que les permita a los comerciantes palear la situación actual de aumentos en servicios, impuestos y alquileres para evitar el cierre de negocios y el desempleo.