Una demanda interpuesta por varios distritos de Estados Unidos advirtió que, desde el 2019, la empresa Meta recibió más de 1,1 millones de reportes sobre la existencia de cuentas de usuarios menores de 13 años en Instagram y, en respuesta, solo inhabilitó una fracción de ellas, mientras que el resto continuó con acceso a la red social.

Así lo dieron a conocer fiscales generales de treinta y tres estados norteamericanos, que en octubre pasado presentaron una demanda conjunta contra Meta, en la que acusaban a la compañía de engañar a los usuarios sobre los daños que sus plataformas Facebook e Instagram pueden llegar a hacer a los menores de edad.

En la demanda, los fiscales alegaron que estas redes sociales “alteraron profundamente las realidades psicológicas y sociales de una generación de jóvenes estadounidenses”, al disponer de características que impulsan “comportamientos dañinos” como la visualización de contenido relacionado con los trastornos alimenticios y el acoso, o promover un uso constante de la plataforma.

El reclamo judicial puntualiza que entre el primer trimestre de 2019 y el segundo trimestre de 2023, Meta recibió más de 1,1 millones de informes de usuarios menores de 13 años en Instagram, y denuncia que a pesar de que la compañía estuvo informada de esta situación, solo se inhabilitaron “unas pocas” y se permitió que el resto continúen en la plataforma.

Estas afirmaciones se basan en información obtenida de correos electrónicos internos, chats de empleados y presentaciones de la empresa, en los que se detalla que las redes sociales de la compañía no cumplen con la ley de privacidad de menores, según el medio The New York Times, que tuvo acceso a la versión extendida de la demanda.

Asimismo, los fiscales denuncian que, durante los últimos años, Meta recopiló la información personal de estos niños y niñas, como su ubicación y dirección de correo electrónico, sin permiso de los padres o tutores.

También la demanda argumenta que, aún conociendo la existencia de estas cuentas, Meta no implementó sistemas de detección eficaces, lo que incumple con la ley federal de privacidad de niños.

Por su parte, en declaraciones recogidas por The New York Times, Meta argumentó que trabajan “continuamente” para hacer que sus redes sociales sean una plataforma segura y apropiada para los adolescente y que, respecto a la demanda, “caracteriza erróneamente” el trabajo de la compañía “utilizando citas selectivas y documentos cuidadosamente seleccionados”.