Más de 4,2 millones de personas carecen de nacionalidad, según una estimación conservadora que pone cifras a la realidad de la apatridia, que además va asociada a una situación «de extrema vulnerabilidad» que se agudizó con la pandemia de Covid-19, alertó hoy el titular de Acnur, el organismo de la ONU para los refugiados.

«La pandemia de Covid-19 ha mostrado más que nunca la necesidad de inclusión y la urgencia de resolver la apatridia: una pandemia no discrimina entre ciudadanos y no ciudadanos«, apuntó el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), Filippo Grandi.

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Grandi advirtió sobre esta situación durante el sexto aniversario de la campaña “I Belong” (“Yo Pertenezco”), con la que el organismo aspira a poner fin a la apatridia en el año 2024, informó la agencia de noticias Europa Press.

Carecer de nacionalidad implica en muchos casos no disponer de servicios esenciales y vivir en condiciones sanitarias inadecuadas, expuestos por tanto a un mayor riesgo de contraer enfermedades.

Acnur tiene registrados a apátridas en al menos 76 países y, aunque se realizaron avances significativos en los últimos años, queda camino por recorrer.

El máximo responsable del Acnur subrayó que «la apatridia es un problema fácilmente resoluble y prevenible», basta con «voluntad política».

«Las consecuencias de la inacción, especialmente en medio de una pandemia, pueden poner en peligro la vida de las personas», alertó.

La pandemia del coronavirus, que tuvo su origen a finales de 2019 en la ciudad china de Wuhan, se expandió rápidamente y al día de hoy se confirmaron más de 51,59 millones de casos positivos a nivel global, y una cifra de muertos que supera los 1,27 millones.

A lo largo del año, los países recurrieron a estrategias restrictivas en un intento de mitigar las olas epidemiológicas, entre las que se incluyeron los cierres fronterizos.

Estas disposiciones afectaron a millones de personas -migrantes o desplazados internos– obligadas a trasladarse para poder sustentar a sus familias, que en muchos casos quedaron en un “limbo” territorial.

Además, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) alertaron ayer sobre el aumento de desplazamientos que se llevarán a cabo debido al impacto socioeconómico generado por la pandemia.

Los organismos afirmaron que la cantidad de migrantes y desplazados superará a la cifra récord registrada a nivel mundial antes del coronavirus.

Asimismo destacaron que la inseguridad alimentaria y el desplazamiento están estrechamente entremezclados, motivo por el cual sostuvieron que el impacto que el coronavirus tuvo en la forma en que se mueve la gente no tiene precedentes.