Bélgica activó el máximo nivel de alerta por amenaza terrorista poco después de que por lo menos dos personas murieran y varias más resultaran heridas, todas al parecer de nacionalidad sueca, cuando un hombre abrió fuego en un lugar céntrico de Bruselas.

El hecho ocurrió cerca de la plaza Sainctelette y del bulevar de Ypres, junto a la sede del Fondo Flamenco para la Vivienda, y poco después el Gobierno anunció que elevaba a 4, el máximo nivel, la alerta por amenaza terrorista.

El gobierno publicó una foto del sospechoso y reportó que se llama Abdesalem L. y es un tunecino de 45 años que reside en Bruselas. Agregó que estaba prófugo y era buscado intensamente. Poco antes, el primer ministro, Alexander De Croo, expresó sus «sentidas condolencias» a los familiares de las víctimas de lo que llamó «cobarde ataque».

Según informaron medios locales, un hombre abrió fuego indiscriminadamente con un fusil tipo Kalashnikov al grito de «¡Alahu akbar!» («Dios es grande», en árabe), lo que abonó la hipótesis de atentado terrorista. El atacante llevaba casco y un chaleco reflectante y huyó en un ciclomotor.

En un video, el atacante aparece en primer plano, se identifica como Slayem Slouma, proclama su pertenencia a Estado Islámico y se jacta de haber matado a «tres suecos» a los que califica de «infieles».

El discurso, muy violento, reivindica su acción para «vengar a los musulmanes en nombre de los que vivimos y morimos por nuestra religión».

Slouma había publicado previamente un mensaje sobre el niño palestino de seis años asesinado este domingo por un hombre de 71 en Chicago, Estados Unidos, «por ser musulmán». Si hubiera sido cristiano «lo habríamos llamado terrorismo y no crimen brutal», alegó.

Esta tarde se jugaba en Bruselas el partido de la Eurocopa entre las selecciones de Bélgica y Suecia, que a raíz del ataque fue suspendido en el entretiempo a pedido de los jugadores, con el marcador empatado 1-1.