El secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, anunció este martes que la funcionaria Victoria Nuland le “ha hecho saber que tiene la intención de dimitir en las próximas semanas como subsecretaria de Estado para Asuntos Políticos”.

Dado el poder que detenta Blinken y que es él quien puso en la superficie las intenciones de “Toria” Nuland, la renuncia, lejos de constituirse en una posibilidad, es casi un hecho indetenible.

El secretario de Estado, con firmeza subrayó: “Tuvo un papel en el que ha personificado el compromiso del presidente Biden de volver a poner la diplomacia en el centro de nuestra política exterior y revitalizar la economía global de Estados Unidos, liderazgo en un momento crucial para nuestra nación y el mundo”.

“El mandato de Toria culmina tres décadas y media de notable servicio público bajo seis presidentes y diez secretarios de Estado. Desde su primer puesto como funcionaria consular en Guangzhou, China, Toria tuvo la mayoría de los puestos de trabajo en este Departamento. Oficial político y oficial económico. Portavoz y jefe de gabinete. Subsecretario Adjunto y Subsecretario. Enviado Especial y Embajador”, añadió.

En otras palabras, más allá de las de Blinken, el ex subsecretario del Tesoro del Gobierno de Ronald Reagan, Paul Craig Roberts, señaló el desempeño de Nuland a la hora de diseñar las políticas “agresivas” de Estados Unidos hacia algunos países del mundo.

“No he visto informes de noticias estadounidenses sobre la renuncia/despido de Nuland.  Esto es increíble. ¿La principal arquitecta de la agresiva política exterior de Washington hacia Rusia e Irán se está retirando, o está siendo expulsada de una poderosa oficina sin explicación?”, se preguntó

Enseguida, Roberts manifestó: “Creo que es demasiado esperar que los demócratas, una colección de cerebros de pájaros, se dieran cuenta de que Nuland era la cara del partido de guerra y que los demócratas no podían sobrevivir a esa cara en las próximas elecciones.  Después de los muchos años de demonización de Putin, Rusia e Irán, ¿cómo se pueden suspender repentinamente los efectos de tal demonización?”

“El anuncio es una sorpresa por muchas razones.  Nuland es el principal y mejor ubicado operativo del control de neoconservadores sobre la política exterior de los Estados Unidos. Además, las cosas van bien para su agenda de guerra.  Durante un año más ha estado abogando por suministrar misiles de largo alcance a Ucrania, y ahora se registran generales alemanes hablando de hacerlo.  Ella ha presionado por las tropas de la OTAN para Ucrania, y el títere francés de Washington ha pedido que se dé este paso”, describió.

Finalmente, Craig Roberts expuso que “en el conflicto israelí-palestino, Nuland ha visto la oportunidad de expandir el conflicto a un ataque contra Irán, durante mucho tiempo una agenda neoconservadora.  La guerra ya se ha expandido a Yemen y hay informes de que Israel tiene la intención de expandir la guerra al Líbano contra Hezbollah, un aliado iraní.

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