El licenciado Mariano Sassano, vicepresidente de la Fundación Rafam Argentina, elaboró un informe donde se resalta la importancia de detectar y prevenir las caídas en los adultos mayores.
Según estadísticas internacionales, cerca de un tercio de las personas de 65 años o más sufren una o más caídas en su domicilio cada año, de mayor o menor relevancia, de las cuales una de cada cuarenta terminan significando una visita al hospital.
A su vez, también existe el riesgo de que el adulto mayor que presenta una caída desarrolle un temor de volver a caer, lo que provoca una limitación en las actividades que realiza diariamente, conocida también como “Síndrome postcaída”.
En Argentina existen organismos públicos con talleres dedicados a la prevención de caídas, como por ejemplo el Hospital de Ramos Mejía de la Ciudad de Buenos Aires. A su vez, indica el Lic. Sassano que hay recomendaciones caseras, recordando la estadística de que el 75 % de los accidentes suceden dentro del hogar.
En este sentido, recomiendan tener en cuenta la iluminación, con luces de noche o lámparas en el dormitorio, pasillo y baño; que las alfombras estén fijas en el suelo o usar aquellas que tienen una cara inferior antideslizante y, en todo caso, clavar o fijar los extremos sueltos; sacar los cables que están en el suelo para que no estorben en las áreas donde se camina; tener precauciones en el baño como un pasamanos en la bañadera, ducha e inodoro, y mantener las paredes y suelo libres de humedad; y finalmente utilizar un calzado como zapatos con suela resistente, antideslizante y que no se resbalen fácilmente, como así también evitar las pantuflas sueltas.
