La Organización de las Naciones Unidas (ONU) pronosticó que América Latina y el Caribe enfrentarán este año un panorama económico «desafiante», marcado por la desaceleración del crecimiento económico, una contracción de la demanda agregada y una caída en su nivel de exportaciones.

Así lo aseguró el informe «Situación y perspectivas de la economía mundial 2024», presentado este jueves por el organismo multilateral, que indicó que “se prevé que el crecimiento económico en América Latina y el Caribe se desacelere en 2024, ya que las condiciones monetarias restrictivas afectarán negativamente a la demanda agregada”.

También advirtió que este año se estará atravesado por «una demanda externa más lenta» que «limitará el crecimiento de las exportaciones; y tanto las vulnerabilidades estructurales como las incertidumbres políticas pesarán negativamente sobre la inversión».

Tras alcanzar en 2023 un crecimiento estimado del 2,2 por ciento, el producto producto interno bruto (PIB) regional experimentará en 2024, según datos del estudio, un aumento del 1,6 por ciento. Para la ONU, la región también se enfrenta a riesgos externos e internos a la baja.

En ese sentido, advirtió que «la tibia expansión económica de Estados Unidos y China en 2024 podría afectar a las exportaciones, las remesas y las entradas de capital», sumado a la «renovada volatilidad en los mercados financieros globales debido a decisiones imprevistas de la Reserva Federal (estadounidense) o una escalada de conflictos geopolíticos podría afectar las entradas de capital a la región».

Asimismo, señaló que las crisis relacionadas con el clima y el fenómeno de «El Niño» podrían «perturbar la actividad económica y desencadenar nuevas presiones inflacionarias.

Ante ese escenario, «el panorama de crecimiento en América Latina y el Caribe se deteriora», acotó el informe y evaluó que «si bien la inflación está retrocediendo en varias economías, el limitado espacio de políticas macroeconómicas y las débiles inversiones seguirán obstaculizando la capacidad de la región para abordar los desafíos sociales y el cambio climático.