La delegación Rosario de la Unión Obrera Metalúrgica expresó a través de su secretario general, Antonio Donello, que es alarmante la situación generada en las fuerzas del trabajo la dura recesión económica que asola al país.

La preocupación detonada por la suspensión de 500 trabajadores del sector por un mes en la carrocera Marco Polo ubicada en Villa Gobernador Gálvez, fue expuesta por el gremialista al afirmar que de seguir así, no solo en marzo van a estar “discutiendo paritarias, sino también despidos”.

Durante el período de suspensión, los obreros cobrarán el 80 % de sus salarios debido al impacto directo de la actividad económica en la empresa, que en los últimos años había concentrado la producción de unidades urbanas, pero “hoy esa demanda se planchó”.

 

En ese contexto, la empresa controlada por capitales brasileños cesó los contratos de unos 140 empleados y avanzó con la suspensión rotativa del personal fijo, que cobrará el 80 % cuando no trabaje.

Asimismo, Donello señaló que se acordó, además de reducir la cantidad de desvinculaciones, el pago de una gratificación para los obreros a los que no les fue renovado el contrato y también el compromiso de recontratarlos si repunta la actividad.

El titular del sindicato metalúrgico se mostró muy preocupado por la situación debido a que pequeñas y medianas empresas y talleres comienzan pararse y a tener problemas con los pagos y la continuidad laboral.

En el mismo día en que se conoció la situación en la planta de Marco Polo, el gremio también fue llamado a intervenir por una situación de crisis en una fábrica de bicicletas.

Al respecto, el abogado de del gremio, Pablo Cerra, dijo que “se está viendo una situación de bastante turbulencia en el ámbito laboral”, con “cierres intempestivos de empresas” en el último mes, debido al aumento de la capacidad ociosa.

Todas estas crisis que se van presentando son motivo de reclamo ante el Ministerio de Trabajo de la provincia y por ello, Donello señaló que se viene trabajando con la cartera laboral para ir conteniendo estas situaciones mediante suspensiones o procedimientos de crisis.

“Lamentablemente cinco años después volvemos a recorrer este camino para tener que defender las fuentes de trabajo”, se lamentó el secretario general de la UOM Rosario, quien también reclamó al Gobierno provincial que eleve su voz ante la Nación para defender al sector.

El panorama, según entiende, podría agravarse en los próximos días mientras que uno de los sectores en los que se pone la lupa es en el de línea blanca, muy sensible a la caída del poder de compra y del consumo en el mercado interno.