Aprueban proyecto de «fideicomiso para el desarrollo austral» y promoción de la producción de biotecnología

La Cámara de Diputados aprobó y envió al Senado el proyecto de ley por el cual avala el denominado «Fideicomiso para el desarrollo austral» (FIDA) firmado entre el Estado Nacional y Tierra del Fuego por el que se dispone un presupuesto estimado de 11.000 millones de pesos que serán destinados para las áreas de infraestructura, energía, salud, ingeniería básica y comunicación.

La exgobernadora fueguina, Rosana Bertone (Frente de Todos) dijo que «se trata de un acuerdo para el desarrollo austral, en el marco de un modelo de país nuevamente federal, para mejorar calidad de nuestros habitantes, para garantizar trabajo y arraigo». «Es el reclamo de una provincia que tiene parte de su territorio usurpado, porque fortaleciendo nuestra infraestructura fortalecemos nuestro reclamo de soberanía», añadió.

La exmandataria provincial señaló también que «desde 2001 venimos transitando y solicitando este fideicomiso pensando en el crecimiento y en el desarrollo, y creemos también que es una manera de construir soberanía, y esa fórmula es para nosotros irremplazable».

Por el PRO, el fueguino Federico Frigerio, lamentó: «Estoy seguro que este convenio le quitará muchos derechos a los fueguinos para adelante porque el pueblo de la provincia pasó de tener el 50 por ciento de las regalías al 20 por ciento. Estamos votando un mal acuerdo, pero si no perderíamos más recursos, no nos queda otra que votar por el mal menor».

Por otra parte, la fueguina Mabel Caparrós (Frente de Todos) y el representante del Movimiento Popular Neuquino, Rolando Figueroa, coincidieron en destacar la importancia del apoyo del Estado nacional a Tierra del Fuego por su característica de receptora de «importantes migraciones internas» y su papel en la «soberanía», entre otras cuestiones.

Entre los que votaron en contra del proyecto, José Luis ESpert, de Avanza Libertad, marcó que la fueguina es una industria deficitaria que «hace años que no funciona».

El acuerdo que hoy fue avalado por la Cámara de Diputados fue firmado en noviembre pasado por el jefe de Gabinete, Juan Manzur; el ministro del Interior, Eduardo «Wado» De Pedro, el extitular de la cartera de Economía, Martín Guzmán, con el gobernador de Tierra del Fuego, Gustavo Melella.

Promoción y desarrollo y producción de la biotecnología y nanotecnología

Poco antes la Cámara baja aprobó por amplia mayoría y giró al Senado el proyecto de promoción y desarrollo y producción de la biotecnología moderna y la nanotecnología, que contempla extender hasta el año 2034 la vigencia del régimen de beneficios fiscales y su alcance a las actividades de nanotecnología.

El dictamen sancionado busca promover el desarrollo y la producción de la biotecnología moderna y la nanotecnología en todo el territorio nacional, con los alcances y limitaciones establecidos en ella y las normas reglamentarias que en consecuencia dicte el Poder Ejecutivo Nacional.

La iniciativa contempla que quienes accedan al régimen de promoción podrán obtener beneficios de amortización acelerada del Impuesto a las Ganancias en una cuota, devolución anticipada del IVA y el otorgamiento de un bono de crédito fiscal correspondiente al 50% de los gastos pagados destinados a las contrataciones de servicios de investigación y desarrollo (I+D) con instituciones del Sistema Público Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación.

Otro punto clave es que la autoridad de aplicación será el Ministerio de Desarrollo Productivo, encargado de aprobar los proyectos que deberán cumplir con la mejora sustancial de procesos productivos, en especial, lo que conlleve contenido de innovación susceptible de aplicación industrial, impacto económico y social.

Sobre la sanción del proyecto, el ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Daniel Filmus, señaló: «Los países centrales llegan a invertir entre 3 y 4 puntos de su PBI en ciencia y tecnología. La importancia de esta ley radica en la posibilidad argentina de impulsar el avance de aquellas áreas sustantivas para nuestro desarrollo en las cuales debemos concentrar la inversión».

Al abrir la reunión, Casaretto consideró «una muy buena noticia» la aprobación del proyecto que «con el consenso alcanzado entre los bloques parlamentarios» y anticipó que compartiría el tiempo para explicar el dictamen de mayoría con el neurocirujano y diputado radical Facundo Manes.

«Creemos que un proyecto importante que tiene que ver con la biotecnología y nanotecnología contiene amortización con el impuesto a las ganancias, y anticipada del IVA» dijo y agregó que se darán «incentivos a los que vienen invertir».

El legislador señaló que hay «tres proyectos de concursos que hicieron empresas vinculadas a la salud animal, a la salud vegetal y humanas».

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En tanto, Manes señaló que «este proyecto viene a prorrogar un incentivo para la ley de Biotecnología y ampliarlo a la nanotecnología» y señaló que los incentivos para que la economía incorpore los nuevos conocimientos «son clave para el desarrollo que nunca alcanzaron».

Marcelo Casaretto

«Los países desarrollados aumentan cada año sus recursos en Ciencia y Tecnología y mantienen incentivos a la inversión privada que incluyen beneficios fiscales», agregó.

Además, dijo que la iniciativa «contribuirá a dirigir los esfuerzos del Estado y promover actividades basadas en la biotecnología moderna y la nanotecnología, para el bien común y el futuro de nuestra patria».

Por su parte, la diputada de a Izquierda, Miryam Bregman, expresó «el rechazo por esta ley y por todo lo que se vota hoy; que bueno sería que de las tantas noticias que surgen del Congreso se sepa que acá se votan estas cosas, beneficios patronales, que lo sepa el pueblo trabajador».

Por su parte, el legislador Jose Luis Espert , de Avanza Libertad, afirmó que «quién podría no estar a favor de incentivos a la industria de nano y biotecnología, que empezó con beneficios en 2007, y hoy factura 2.100 millones de dólares, cuando a nivel mundial el comercio es de 75.000 millones de dólares, y Argentina representaría el 3 por ciento».

Sin embargo, consideró: «15 años después creo que con esta ayuda realizada por los contribuyentes ya es suficiente, esta industria ya no necesita más el andador, la ayuda por otros 15 años no sería necesaria».