LUNES, 02 DE DIC

¿Cómo llevan comerciantes del centro rosarino la modalidad «take away»?

La consulta directa a dueños y encargados de locales gastronómicos, respecto a cual había sido el resultado de la modalidad impuesta como protocolo para la venta de viandas y comidas, en la cual deberán continuar operando al menos por siete días, revela la gravedad de la crisis.

 

En esta cuarentena por pandemia, acompañada de protocolos de cuidado sanitarios, han surgido nuevas modalidades que permiten, de alguna manera, que los comercios gastronómicos (y algunos otros rubros) puedan atender al público y vender los almuerzos y cenas a través del formato take away, que es la entrega de los productos en la puerta del local (llanamente «para llevar»).

Conclusión hizo un relevamiento al respecto, consultando a los pequeños locales gastronómicos del centro rosarino, sobre como ha respondido la gente a este nuevo servicio, acatando el protocolo emitido por la cartera de Salud provincial.

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La encargada de un local contó que son «muy bajas las ventas«, pero que que están «abiertos porque tenemos que seguir sustentando el trabajo de los empleados, pero la verdad que esta difícil«.

Sobre la aceptación de la modalidad take away, la responsable explicó que los clientes «entran, preguntan y, a veces, compran«,  aunque en relación al servicio «hay gente que no le gusta el envase descartable«.

El dueño de un bar de café y viandas,  dijo que «por ahora venimos muy tranquilos«, y cree que «para la semana próxima, parece que va a estar igual».

En cuanto a la economía del negocio, el entrevistado mencionó que la pilotean «como se puede«, a la espera de  que «el gobierno tome alguna medida para que, al menos, nos dejen laburar un poco».

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Por su parte, la empleada de un negocio de venta de meriendas, mencionó que  «se vislumbra bastante pesada» esta situación, ya que «las ventas bajaron en su mayoría, estábamos a la mitad, ahora es un poco menos».

«El take away lo han aceptado bien, pero a la gente les molesta no poder sentarse a disfrutar. Hay una merma importante. Cuando le decís a la gente que no se puede sentar, prefieren irse», añadió.

En cuanto a las restricciones o medidas que se puedan tomar desde el gobierno provincial de aquí en más, la comerciante opinó: «Con a continuidad de las restricciones la gente se va a asustar mucho y va a venir menos. Yo vine en el 2016 acá y ya había una crisis enorme, ahora con la pandemia, esto es mucho más grave«.

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