Israel dice estar en una “nueva etapa” de la guerra y el Líbano pidió la intervención de la ONU
El primer ministro israelí, Yoav Gallant, elogió el avance del ejército, pero no comentó el presunto papel desempeñado por su país en los recientes ataques en Líbano. Por su parte, autoridades libanesas pidieron que la ONU ponga fin a la “guerra tecnológica”.
El ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, anunció este miércoles que su país se encuentra “en una nueva etapa” del conflicto con Hezbolá, a dos días de reportadas las primeras explosiones de dispositivos de comunicación –conocidos como beepers, buscapersonas o walkie-talkies– en todo Líbano, un atentado adjudicado a Israel. En tanto, su par libanés, Najib Mikati, pidió la intervención de la Organización de Nacionales Unidas (ONU).
En una base militar aérea en el norte de Israel, Gallant destacó: “Nos encontramos en el inicio de una nueva etapa de la guerra, esto exige audacia, determinación y perseverancia”.
Por su parte, el primer ministro del Líbano, Najib Mikati, recordó que la agrupación Hezbolá e Israel están en una “guerra”, y, en referencia a la explosión de beepers, advirtió que “no hay palabras para expresar la brutalidad de este crimen”.
Según reportó la agencia de noticias AFP, Mikati le pidió este jueves a la ONU que ponga fin a la “guerra tecnológica” impulsada por Israel. A entender del funcionario, el organismo debería tomar una “una postura firme para detener la agresión israelí contra Líbano y la guerra tecnológica que está librando”.
Paralelamente, el ministro de Asuntos Exteriores de Líbano, Abdallah Bou Habib, aseguró que su país vive un “momento aterrador”, y alertó que el conflicto podría escalar e ir más allá de las fronteras: “Tenemos miedo de que se avecine una guerra, porque no queremos una guerra”.
“Ahora estamos hablando del comienzo de una guerra, por eso vamos a acudir al Consejo de Seguridad de la ONU para detener esto. El Gobierno del Líbano no quiere la guerra”, añadió el canciller.
El gabinete de seguridad del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, decidió ampliar los objetivos del conflicto con el fin de permitir que los ciudadanos desplazados puedan volver a las zonas fronterizas afectadas por el combate con Hezbolá.
En este sentido, Gallant elogió el avance del ejército, pero no comentó el presunto papel desempeñado por Israel en los recientes ataques en Líbano.
Las explosiones de beepers en Líbano se reportaron durante dos días y causaron la muerte de al menos 21 personas, incluyendo niños, e hirieron a más de 3.000. Israel no se responsabilizó de estos incidentes.