La designación de Bertella en la gerencia de operaciones de mercado del Banco Central muestra la capacidad de lobby del HSBC para colarse en puestos claves para la regulación del sistema financiero. Es el segundo funcionario que llega a la gestión del Gobierno de Mauricio Macri desde el banco británico. En diciembre de 2015, ya se había designado a la abogada del banco, María Eugenia Talerico, como la número dos de la Unidad de Información Financiera (UIF). La presidencia de este organismo de control la ocupa el ex empleado del Fondo Monetario Internacional,  Mariano Federici.

Talerico, tras haber sido titular del Tribunal de Disciplina del Colegio Público de Abogados de la Capital Federal en 2010, se desempeñó como abogada del HSBC. En distintos expedientes judiciales, donde se investigó a la entidad por haber promocionado la fuga de 3500 millones de dólares en 4040 cuentas en Suiza, Talerico figuró como la apoderada del banco británico. Además, fue socia de Diego Richards, abogado del ex jefe de la Metropolitana, Jorge “Fino” Palacios, en la causa que investiga las escuchas ilegales por la cual Macri sigue procesado.

La tarea de la UIF se concentra en la supervisión de las actividades de los bancos, los cuales deben informar por norma operaciones sospechosas de clientes. La ex abogada del HSBC, que hoy tiene a su cargo la regulación de las entidades bancarias, fue la que defendió a la institución británica en la justicia por sospechas de evasión. Se trata de una investigación que hizo que el presidente de la filial del HSBC en la Argentina, Gabriel Martino, pierda su licencia para trabajar en el sistema financiero en 2015, aunque la recuperó el año pasado con la llegada a gobierno de Mauricio Macri.

Martino es uno de los banqueros de la city que muestra mayor apoyo a cada una de las medidas tomadas por el Gobierno. “Pegamos en el palo de ser Venezuela” es una de las frases que más repite en los eventos empresarios. Celebró el anuncio del blanqueo y afirmó en la primera mitad del año que mantener la tasa de interés de las Lebcas en 38 por ciento era una herramienta de política monetaria indiscutible, pese al impacto nocivo en materia de actividad y consumo. El titular del HSBC no sólo logró regresar a la actividad financiera el último año sino que ganó poder al interior de la estructura estatal.