Los últimos días circular por el centro rosarino ha representado un caos peor al habitual: obras en calle Sarmiento, caño roto y complicaciones en calle Mitre, cambio de paradas en distintas líneas de colectivo e intensivos controles de tránsito.
En ese contexto, cuando el secretario General del municipio, Pablo Javkin fue consultado sobre la posibilidad de determinar que el microcentro sea cerrado dijo que primero «habrá que terminar las obras para tomar una medida más de fondo».
«Habrá que esperar que terminen las obras, para intensificar los controles y tomar una medida más de fondo», señaló el funcionario y agregó: «Hoy lo primordial es terminar la obra, que los comerciantes vean y puedan apreciar el entorno transformado y obviamente eso permitirá medir cómo queda la circulación».
En ese sentido, explicó que las dificultades en la circulación se deben a la conjunción de al menos tres cuestiones: obras de mejoramiento de casco histórico, «que tienen un tiempo de ejecución y afectan una arteria principal como es calle Sarmiento»; la situación de calle Mitre «con una rotura de un caño, que también complicó»; y el cambio de líneas de colectivo, «sobre todo en calle Santa Fe que tiene un impacto».
Respecto al control que está aplicando el tránsito sobre las zonas más colapsadas del microcentro rosarino dijo que «se trata de una experiencia que inició ayer y que tiene que ver con un ejercicio más fuerte del control en hora pico, horario bancario. De esta experiencia de control, surgirá lo que es más recomendable. Seguro habrá que hacer un poco de todo: reforzar el control, estudiar la movilidad de algunas líneas, y la restricción en algún horario».
En ese sentido, indicó que «hay prioridad del transporte público, y lo demás tiene que ver con el tipo de embotellamiento que se dé».
Finalmente se refirió a las chances de realizar las obras durante horario nocturno para descomprimir el embotellamiento de vehículos y así facilitar la circulación pero aseguró que si bien en algunos puntos de la ciudad se está trabajando de noche y los fines de semana, «siempre hay que tener en cuenta el descanso de los vecinos: de día el tránsito se complica, pero de noche los vecinos acusan que no pueden descansar, entonces dependiendo de la obra y el tiempo que requiera se puede o no trabajar de noche».
