Por Guido Brunet

El tratamiento para las diferentes enfermedades intestinales ha cambiado en los últimos años con los avances de la medicina. Es por eso que los tratamientos hoy pueden terminar en un lapso menor de tiempo y el paciente, si debe ser ostomizado, realizar sus actividades de forma normal.

Con motivo del Congreso de Gastroenterología y Endoscopía digestiva que se desarrolló en la ciudad, Conclusión dialogó con la coordinadora de la agrupación y licenciada en Ostomía, Leticia Caramutti. La profesional se refirió a las enfermedades intestinales y los diferentes cuidados y tratamientos que debe tener un paciente.

Caramutti resaltó la relevancia de la prevención y la detección a tiempo de estas enfermedades. “Hay personas que están ostomizadas por falta de conocimiento, por no ir al médico a tiempo”, comenzó diciendo.

La ostomía es una operación quirúrgica en la que se practica una abertura en la pared abdominal para dar salida a una víscera al exterior, como el tracto intestinal o uno o ambos uréteres. “No se habla porque se trata de lo que es la eliminación y nadie habla de eso, es una cuestión cultura, un tema tabú”, consideró la responsable del grupo.

“Antiguamente se le llamaba la bolsa, pero las cosas han cambiado, las cirugías han mejorado. Son cada vez más los pacientes que tienen por poco tiempo su ostomía por cómo ha evolucionado la medicina”, continuó.

Sobre las formas de detectar esta condición, la licenciada comenta que la clave es el “cambio en el hábito evacuatorio”, que por momentos puede confundirse con una ingesta de un alimento en mal estado.

Dolores crónicos gastrointestinales, diarrea e inflamación son algunos de los síntomas. Ante esto la profesional recomienda dirigirse a un gastroenterólogo, ya que “puede estar gestándose la enfermedad”.

Si uno tiene más de 30 años y en su familia hay antecedentes de cáncer de colon, la profesional recomienda realizarse un estudio una vez por año. En cambio, si padres o abuelos no han sufrido la enfermedad, pero uno comienza a notar algunos de los síntomas antes mencionados, es aconsejable visitar a un médico y qué este indique los pasos a seguir. “El estudio es corto, sencillo y se deja tranquila a la familia”, describe Leticia.

El tema de la alimentación es importante, “comemos mal, chacinados, fiambres, apurados, y cuando queremos comer más sano, no sabemos lo que estamos comiendo”, manifiesta Caramutti. “Está relacionado, pero también hay que ver la disposición que tiene cada ser humano y el antecedente que tenga”, completa la licenciada.

Una vez detectada la enfermedad, “el tratamiento es sencillo”, dice Caramutti. “Lo que no es fácil es concientizar a las personas a hacerse un estudio, que no es tan traumático como antes”, manifiesta la profesional.

Congreso en Rosario

En el marco del Congreso de Gastroenterología y Endoscopía digestiva que se desarrolló en Rosario se desplegó un colon inflable de 21 metros cuadrados en la explanada de la Plaza Montenegro en el que se invitó a recorrer y conocer las distintas enfermedades intestinales y sus formas de prevención.

La actividad fue desarrollada por la fundación Fundecu de Neuquén, que trabaja para concientizar sobre la enfermedad de crohn o colitis ulcerosa. Se trata de una enfermedad inflamatoria intestinal, de cada mil personas solamente dos pueden llegar a tenerlo y se desarrolla entre los 13 y los 30 años.

Con respecto a esta patología, que es padecida por dos personas de cada mil, la profesional explica que “no se cura, pero se trata, a diferencia del cáncer de colon o recto”.

“Con una ostomía se puede tener una vida normal, se puede vivir perfectamente”, finaliza Caramutti.